El Celta busca por primera vez en ocho temporadas un guardameta foráneo con bagaje en Primera División para afrontar el primer tramo de temporada
24 ago 2020 . Actualizado a las 21:29 h.Una norma no escrita pero defendida con vehemencia está a punto de caerse en el Celta. Por primera vez el equipo vigués busca en el mercado un portero foráneo con experiencia y bagaje en Primera División para paliar las lesiones de Rubén Blanco y Sergio Álvarez, que no estarán aptos en el mejor de los casos hasta finales de octubre pese a quedarse sin vacaciones este verano. Óscar García recordó que Iván Villar solo tiene cuatro partidos en la máxima categoría y que tanto Ruly García, que estuvo cedido en el Astorga, como Iago Domínguez, que defendió la portería del juvenil A, son dos porteros en formación. Un escenario que obliga al club a mover ficha en contra de su voluntad.
La última vez que un guardameta no formado en A Madroa defendió la portería del Celta fue el 26 de mayo del 2013 en Valladolid. Fue Javi Varas, que se lesionó en aquel partido dando entrada a Rubén. Desde entonces, siempre han sido guardametas de casa (descontando los cinco minutos de Néstor Díaz ante el Levante en el 2015).
El mercado de porteros tampoco es un asunto fácil en el fútbol español. Los primeros espadas están a buen recaudo en sus clubes y son pocos los nombres que suenan. Uno de ellos es el de Roberto Jiménez, madrileño de 34 años que acabó jugando la temporada con el Alavés cedido por el West Ham, equipo al que pertenece pero para el que no cuenta. De hecho es uno de los nombres que suena para el Valladolid, pero en Pucela ya apuntan a que tienen próximo un acuerdo con Leandro Chichizola, por el momento jugador del Getafe.
Gerónimo Rulli estuvo cedido en el Montpellier francés por parte de la Real Sociedad, con quien tiene dos años más de contrato pero que tampoco parece contar es otro de los nombres propios.
Entre los guardametas que están sin equipo el de más nombre y experiencia es el luso Beto, que jugó tres temporadas en el Sevilla y que en el fútbol portugués pasó por equipos importantes como Sporting y Braga. El Göztepe turco fue su último destino. También están sin equipo Roberto Santamaría (exRayo), Xabi Irureta (exEibar) y Manu Herrera (exBetis), además de Luca Zidane, que disputó dos partidos con el Real Madrid.
Otra vía sería apostar por un portero extranjero con experiencia en competiciones importantes pero no en el fútbol español.
La elección tiene la dificultad añadida de la temporalidad. El Celta confía ciegamente en Rubén Blanco, que firmó una excelente temporada el curso pasado hasta que llegó su lesión y, además, Sergio Álvarez siempre ha cumplido cada vez que tuvo oportunidad y aún sin jugar tiene un peso muy importante en el vestuario. Los dos, cuando vuelvan, deben ser en teoría los primeros espadas.
Por el momento Óscar García trabaja con un portero del primer equipo y dos de las categorías inferiores del Celta. Iván Villar cumplió en los tres partidos que disputó en el recta final de la temporada pasada, pero todavía no ha termino de explotar. El Celta sumó un punto en esa triple cita (el del Espanyol en la última jornada). A día de hoy es el único guardameta disponible para comenzar la temporada ya que Ruly García acaba de regresar desde el Atlético Astorga, en donde jugó el curso pasado en el grupo castellano-leonés de Tercera División.
Iago Domínguez fue uno de los tres porteros utilizados por Jorge Cuesta la temporada pasada en el juvenil A que finalizó la liga invicto y se clasificó para la Youth League.
