Algo se tiene que estar haciendo mal para que los jugadores que suben al primer equipo y luego bajan no jueguen en el filial. Si no compites, no mejoras y creo que se debe a una falta de comunicación que tiene que resolver el club. En mi época estábamos sincronizados primer equipo y filial con el director deportivo y cuando un jugador bajaba, tenía que jugar. De lo contrario, estabas premiando a un futbolista con subir para luego no sacarle rendimiento ni para el club ni a nivel personal. Va en perjuicio del propio futbolista.
Si un jugador está con el primer equipo es porque tiene proyección y calidad que se entiende que puede aportar algo el día de mañana. Lo normal cuando estaba en el filial era que bajaran a entrenar el viernes. Para ellos no era un paso atrás. Se trata de que haya una buena comunicación y demarcarse unas pautas para que no ocurran estas situaciones tan complejas.
