Dos goles de Brais Méndez le dan el cuarto triunfo consecutivo a los vigueses ante un aguerrido Alavés

Xosé Ramón Castro
Redactor de Vigo

El Celta prolonga su estado de euforia y seis años después vuelve a encadenar cuatro triunfos consecutivos en liga al superar al Alavés con dos goles de Brais Méndez, que ofició de nueve mentiroso en el primer tiempo. Los celestes fueron un vendaval en el acto inicial y sufrieron en el segundo, pero cuando peor lo pasaban llegó el segundo tanto de Brais, que el primer acto había anotado de cabeza.

El primer tiempo se jugó al esprint. El Alavés salió enchufado y buscó el juego aéreo de Joselu para intimidar, aunque fueron dos imprecisiones de Tapia la que pusieron el corazón celeste en un puño.

Coincidió esa oleada vitoriana con la fase de asentamiento de un Celta que hizo números para adaptarse a un dibujo que colocaba a Tapia entre centrales casi siempre, a Denis como mediocentro organizador, a Brais como falso nueve para liberar a Aspas y con Beltrán, la novedad en el once además de Murillo, en banda.

Los movimientos no cambiaron el apetito ofensivo celeste, que en modo avión coleccionó oportunidades en el primer tiempo a medida que el Alavés menguaba pero solo Brais, el nueve mentiroso, acertó ante Pacheco. De cabeza y después de un extraordinario centro de Olaza.

No hubo más goles celestes en el primer tiempo porque Aspas fue demasiado generoso en un uno contra uno con Pacheco, porque a Nolito le bloquearon un disparo a quemarropa y porque el sanluqueño no pudo con el meta rival en un mano a mano. Un monólogo bajo la batuta de un imperial Denis, con Tapia barriéndolo todo y con las bandas convertidas en puñales. Y con un sistema defensivo que poco a poco fue diluyendo a la armada gallega del rival.

El Celta no mató el partido en el primer tiempo y sufrió en el segundo, aunque comenzó con una ocasión de Brais en forma de contra. Los vigueses se posicionaron en un 4-1-4-1 con el mosense en banda y Aspas en punta, pero el Alavés subió la presión y adelantó a los laterales lo que comenzó a complicar a los vigueses, especialmente con el juego aéreo. Joselu envió el primer aviso al que respondió Rubén con una gran parada.

A medida que caían los minutos los vitorianos tenían más balón, ganaban todas las disputan y encerraban al Celta, que ya jugaba con tres centrales y dos pivotes, en su área, pero cuando peor pintaba el panorama los vigueses encontraron una contra con Olaza para que Aspas se vistiese de nuevo de asistente y Brais, que ya no era nueve mentiroso, marcase el segundo a bocajarro.

Ficha técnica:

2. RC Celta: Rubén Blanco; Hugo Mallo, Araujo, Murillo, Olaza (Aidoo, min. 92); Tapia; Beltrán (Fontán, min. 74), Denis Suárez (Okay, min. 70), Nolito (min. 70); Brais Méndez, Aspas (Emre Mor, min. 92)

0. Deportivo Alavés: Pacheco; Navarro, Lejeune, Ely (Tachi, min. 40), Duarte; Jota (Tavares, min. 73), Battaglia (Manu, min. 84), Pina, Rioja (Borja Sainz, min. 84); Joselu, Lucas Pérez (Guidetti, min. 73)

Goles: 1-0, m.19: Brais Méndez. 2-0, m.79: Brais Méndez.

Árbitro: Alberola Rojas (colegio castellano manchego). Amonestó por parte del Celta a Araujo (min. 55) y Nolito (min. 60); y por parte del Alavés, a Battaglia (min. 20) y Pina (min. 35)

Incidencias. Encuentro correspondiente a la decimocuarta jornada de la Liga Santander disputado en el estadio Abanca Balaídos.