![](https://img.lavdg.com/sc/jACACqAt-JkrgmyqmkERGlxQ5vs=/480x/2021/02/13/00121613175962250911236/Foto/VF13P39F4_1251.jpg)
El colegiado había tenido varios episodios polémicos en sus últimos duelos con el Celta
13 feb 2021 . Actualizado a las 05:00 h.Muchas miradas estaban puestas ayer en el colegiado Ricardo de Burgos Bengoetxea, con el que el Celta había vivido varios episodios polémicos tanto en temporadas anteriores como incluso en la actual, en el duelo de ida frente al mismo rival. En esa ocasión, el colegiado no fue protagonista y, además, los vigueses lograron ganar con él seis partidos después.
La última victoria con este trencilla había sido hace dos años, el 2 de febrero del 2019 frente al Sevilla en Balaídos (1-0). Pero desde entonces habían coincidido en otros seis compromisos que se habían saldado con cuatro derrotas (2-0 ante el Atlético, 5-1 ante el Mallorca, 2-0 ante Osasuna y 2-0 ante el Real Madrid) y dos empates (2-2 ante el Mallorca y 1-1 contra el Elche).
De Burgos, eso sí, mostró tres tarjetas amarillas a los célticos anoche, dos de las cuales acarrean suspensión. Es el caso de Iago Aspas, que vio su quinta amarilla por «discutir con un contrario sin llegar a insultos ni a la amenaza», según se recoge en el acta, y de Brais Méndez, que la recibió por «derribar a un contrario en la disputa del balón de forma temeraria». Además, Ferreyra vio la primera para él por «golpear a un rival con su brazo de forma temeraria en la disputa del balón».