Fran Beltrán: «Estos cinco años me han venido de lujo como persona y como futbolista»

GRADA DE RÍO

Oscar Vázquez

«Hay que picar mucha piedra para conseguir tus objetivos», dice de su cambio de rol

11 feb 2023 . Actualizado a las 05:00 h.

Francisco José Beltrán Peinado (Madrid, 1999) acumula cinco temporadas en el Celta. Llegó como un niño, según sus propias palabras, y ha crecido como persona y como futbolista vestido de celeste. En Vigo, confiesa, aprendió a picar piedra y a no darse nunca por vencido para voltear una suplencia que le llevó a pensar en cambiar de aires. En lo deportivo, no quiere repetir la experiencia de los dos años salvándose en la última jornada, por eso pretende solventar la permanencia por la vía rápida, comenzando por el partido de mañana ante el Atlético de Madrid.

—¿Cómo resumía estos cinco años en Vigo?

—Vine como un niño y estos cinco años han servido para crecer mucho como persona, una barbaridad, y como futbolista me han servido para madurar. Estuve casi dos años como suplente y aquello me sirvió para saber que esa muy difícil estar siempre en el once titular, que aunque estés jugando, te lo tienes que currar todos los días. Estos cinco años en Vigo me han venido de lujo como persona y como futbolista. Le pondría un 8 de nota, porque por el tema deportivo no puede ser un diez. Venir al Celta ha sido una de las mejores decisiones de mi vida.

—¿Qué queda del Fran del Rayo?

—Son dos personas diferentes. Fran rayista era un niño con mucha ilusión, mi familia toda es de allí, tengo buenos amigos, hablo mucho con personas de allí y me alegro con todos los éxitos que están teniendo.

—¿Qué cambió en su juego?

—Muchas facetas. Creo que ahora me perfilo mejor, antes no hacía tantos cambios y creo que hago más cambios de orientación, creo que tengo más idea de lo que es el juego. Antes, cuando las cosas iban mal, tenía miedo de liarla por ser el joven y según ha ido pasando todo, creo que he sido capaz de tener más confianza en mí. Al final, todo pasa por algo y a veces tienes que sufrir para ser mejor.

—Todo el mundo habla de sus kilómetros y de su equilibrio, pero además es un de los pasadores más fiables de la liga.

—Yo intento ayudar al equipo como pueda, dando equilibrio, haciendo que el equipo juegue de un lado a otro, a veces es el trabajo sucio que no se ve. Hay gente que puede decir que juego muy atrás y doy pases atrás, pero han de entender que no todo es ir hacia arriba, sino que también hay que controlar la situación del juego y creo que cada año intento mejorar y poco a poco voy madurando como futbolista.

—¿Cómo llevó aquel momento crítico en el que dijo que estaba dispuesto a marcharse?

—Era muy joven, necesitaba jugar. Me veía capacitado para entrar en el once y veía que no tenía mi oportunidad y que si la tenía, volvía al banquillo. Se vio en Huesca, en un partido que ganamos 3-4, jugué los 90 minutos, marqué un gol y al siguiente partido, otra vez al banco. Fue una situación desagradable, porque veía que podía ayudar al equipo y no lo hacía. Pero con trabajo e insistencia, al final pude jugar.

—¿Cuál fue la clave para hacer cambiar de idea a Coudet?

—Ir todos los días al máximo y entrenar a full en el campo. Trabajo duro, constancia y sacrificio. Hay que picar mucha piedra para poder conseguir tus objetivos y creo que en ese momento lo hice. Me sirvió para comprobar que nunca te debes dar por vencido.

—A nivel deportivo, de los cinco años, casi todos sufriendo ¿Tiene alguna explicación?

—Lo digo en el vestuario. Desde que he llegado, salvo dos temporadas con el Chacho que estuvimos tranquilos, al final siempre estuvimos en el lío. Hubo dos que se pasó muy mal y yo me lo tomo como un aprendizaje. En lo personal, me ha servido para darme cuenta y valorar lo que cuesta tener un puesto y lo que sufre la gente que rodea al club. No se lo deseo a nadie. Hay que hacer el trabajo antes.

—Cuando pasa tantas veces, no puede ser casualidad, ¿a qué puede ser debido?

—Cada temporada hay una cosa distinta, pero todo se resume en que debemos terminar las cosas antes y no pensar en lo que pueda pasar que si Europa o estar arriba... No, debemos tener los pies en la tierra y ser conscientes de que por mucha plantilla que se pueda tener, todos tenemos que ir en la misma dirección y desde abajo empujar hacia arriba.

—Todos los verano se mira para arriba y al final, el equipo termina mirando para abajo.

—No por tener mucho dinero o una de las mejores plantillas se puede ganar la Champions, por ejemplo. En el fútbol hay que tener un equipo con las ideas muy claras, que todos vayamos a una y viendo los últimos partidos, creo que estamos en la dirección correcta.

«Me gusta la responsabilidad de estar solo en el medio»

Para el mediocentro de Seseña, la principal diferencia en el Celta desde la llegada de Carvalhal es el aspecto defensivo, lo que le permite encajar menos goles.

—¿En qué cambió el equipo con Carvalhal?

—Puede haber un cambio en cuanto a los resultados. Encajamos menos que antes, pero tampoco veo un gran cambio. Lo que sí veo es que atrás estamos encajando mucho mejor las cosas y que estamos trabajando como un bloque junto todo el equipo.

—Parece que se sienten cómodos en el 4-4-2.

—Al final no solo tenemos un sistema. Los grandes equipos saben jugar de distinta forma y creo que estamos jugando según el partido que sea o incluso en el mismo partido de las dos maneras.

—¿Usted cómo se siente mejor, jugando con alguien al lado o de pivote único?

—Ahora normalmente tengo a Gabri al lado, pero le dejo que suba mucho porque tiene llegada, da asistencias y es como si estuviera un poco solo en el medio, pero a mí me gusta la responsabilidad de estar solo en el medio y de tener equilibrio. Me da igual jugar solo o con uno al lado, para mí no cambia nada.

—¿Le sorprende la irrupción de Gabri Veiga?

—No me sorprende, ya sabíamos que era un jugador muy bueno. Es una persona diez, nunca con una mala cara, sino arrimando el hombro y trabajando. Nos alegramos todos de que tenga esta irrupción en el mundo del fútbol y que nos ayude con tantos goles, tantas asistencias y con su juego.

—¿Cómo valora la competencia con Tapia?

—Creo que los dos somos grandes futbolistas. La competencia que tenemos es buena, creo que los dos podemos desempeñar un buen papel dentro del equipo y lo que debemos hacer es hacernos mejor el uno al otro.

«Tenemos potencial para conseguir la tercera», dice de la cita con el Atlético

Beltrán no renuncia al triunfo ante el Atlético, aunque advierte de su potencial, especialmente en la parte ofensiva.

—¿Cómo ve el partido con el Atlético?

—Es muy difícil, pero nosotros venimos de dos victorias consecutivas y tenemos potencial suficiente para poder conseguir la tercera y vamos con todo.

—¿En un peligro Griezmann jugando entre líneas?

—Son peligrosos todos, tienen gente arriba muy buena. Tenemos que estar juntitos, ser un equipo aguerrido y fuerte y ponerles las cosas difíciles, porque creo que podemos sacar puntos.

—¿Cómo ve la lucha por la salvación?

—Son muchos equipos por abajo, creo que demasiados. Es bonita esa lucha, lo que no es tan bonito es que estés tu dentro. Intentaremos hacer los deberes cuanto antes, estar en una zona tranquila y lo más arriba posible para no sufrir tanto como en mis dos primeras temporadas.

—¿Va a estar más cara la permanencia?

—En los últimos años está alrededor de los 40 puntos, pero yo no me quiero detener en eso, lo que quiero es terminar el trabajo cuanto antes, conseguir puntos y estar en lo más arriba posible.

—¿Están más tranquilos después de estos dos triunfos?

—Creo que sí. Necesitábamos estas dos victorias y, por suerte, el trabajo está viendo sus frutos. Tenemos que seguir así, aunque tenemos dos rivales ahora muy fuertes.

—¿Cuál es su análisis para que el equipo llegase a meterse en el lío de la permanencia?

—No se estaban haciendo mal las cosas. Nuestro juego era bueno, pero o no marcábamos o teníamos errores atrás que nos penalizaban. Ahora tenemos que aprovechar las oportunidades y exprimir todas las portería a cero que tengamos.