Contento con el esfuerzo de sus jugadores, el técnico del Celta B destacó que estaban dando la cara frente al Deportivo hasta la expulsión y cree que esta derrota les hará más fuertes
26 mar 2023 . Actualizado a las 21:46 h.El entrenador del Celta B, Claudio Giráldez, se mostró satisfecho con el esfuerzo de sus jugadores en la derrota frente al Deportivo en Riazor y no ocultó su desacuerdo con la expulsión de Fernando Medrano. «Lo dije alguna vez: los árbitros son igual de buenos o malos que nosotros, estamos en la misma categoría. Condiciona mucho quedarnos con uno menos y hay que aprender de los errores cometidos», introdujo. Y añadió: «La primera amarilla creo que no es ni falta, pero es cosa del árbitro que está en ese momento. Sabíamos de la estadística de este árbitro en cuanto a victorias locales», deslizó.
Preguntado por cómo se encontraba Fernando Medrano después de este revés que tuvo lugar, además, en el día de su cumpleaños, se deshizo en elogios hacia él: «Está fastidiado. Es un chico muy maduro, espectacular y que está haciendo una temporada increíble, brutal. Ha defendido muchas veces con amarilla haciéndolo muy bien y no le toca en ninguna de las dos acciones, no me parece ni un error. Mañana será otro día y estará bien».
En su reflexión, señaló el porriñés que hicieron «un esfuerzo bueno» y que el partido estaba respondiendo a lo que buscaban hasta ese momento de quedarse en inferioridad: «Estábamos dando la cara y con uno menos nos ha costado más ser nosotros mismos, como es lógico». A su juicio, jugaban contra un rival «que es el mejor en fase 3 de la liga», por lo que, en inferioridad, se vieron en la tesitura de tener que defender muy cerca de su portería «y con tanto talento, pueden hacer daño».
Repasando la primera mitad hasta el lance que marca el partido, Giráldez señaló que estaba siendo igualada, sin ocasiones para ninguno. «Hubo una llegada nuestra, otra suya... No estábamos sufriendo ninguno de los dos en defensa. Nos igualan a nivel defensivo la línea de cinco, empezamos haciendo daño con Carrique al principio, luego se ajustaron mejor», dijo insistiendo en que no estaban sufriendo en defensa y que estaban «controlando bien los movimientos de Quiles y Soriano por dentro», aunque en alguna de Lucas Pérez pudieron «defender mejor».
Entendían que el resultado de empate sin goles «con los minutos podía hacerles desordenarse», pero tuvieron la «mala suerte» de la expulsión y, luego, de encajar «demasiado pronto el 1-0», valoró. Destacó que es la primera derrota que sufren por más de un gol de diferencia en toda la temporada. «Estoy contento con la idea, con la personalidad con la que intentamos jugar la primera parte, sobre todo. Estamos quintos, es una clasificación brutal y quedan nueve jornadas. Ahora vienen dos partidos en casa que tenemos que intentar sacar para afianzarnos».
En clave de futuro para lo que queda, dijo que deben verlo «con ilusión y ambición». Se queda con que los jugadores «han tenido una prueba de fuego que les prepara para la Primera División». «Algunos (de los jugadores) no son capaces de ver la lectura positiva de estos partidos, pero la hay y, desde mañana, reflexionaremos sobre ella y seguramente nos hará más fuertes». Además, quiso agradecer a la afición desplazada su apoyo al equipo.
En clave personal, sobre su primera experiencia en Riazor, respondió: «Soy un entrenador joven, tengo que seguir aprendiendo y mejorando como todos los chicos. Me he sentido cómodo, como un partido más. Y con este ambiente da gusto estar», finalizó.