
El guardameta del Celta tuvo una intervención providencial al final del partido
24 may 2023 . Actualizado a las 05:00 h.Tres paradas, una de ellas para salvar un punto, y mayores detuvo un penalti que hubo que repetir por orden del VAR. Iván Villar fue uno de los grandes protagonistas del resurgir, a medias, del Celta ante un Girona que en la segunda mitad demostró su aureola. «Intento dejarme la piel en cada partido y en cada entrenamiento para ayudar al equipo y en esta ocasión ayudé a sumar un punto y en Cádiz espero ayudar a sumar tres», comentó el portero de Aldán desde de la contienda. Tuvo un primer tiempo relativamente tranquilo, porque el equipo vigués atacó más y el Girona apenas vio portería, hasta que Artero se sacó un remate muy cerca del intermedio al que respondió el céltico con una buena estirada.
La segunda mitad fue más movida, porque el Girona vivió más cerca del área rival y porque el portero de Aldán tuvo que intervenir en un par de ocasiones. La primera, para adivinar el lanzamiento de un penalti de Cristhian Stuani. El uruguayo buscó su zona de seguridad y golpeó a la derecha y hasta ahí llegó Iván. En la repetición le aguantó hasta el último instante y el delantero terminó marcando por un ajustado remate al palo contrario.
La traca de Iván Villar quedó para el final. En el minuto 96 un remate del canterano Roca, colocado al segundo palo y que amenazaba con hacer añicos la frágil moral del Celta, se encontró con la manopla derecha del canterano, que desvió el balón a córner y salvó un punto. «Veníamos de una mala racha de no sumar que teníamos que cortar. Hay que verlo desde ese lado y coger confianza para el partido de Cádiz», en donde a los vigueses les espera otra final por la supervivencia.
En un año de lo más duro en la portería, Iván Villar se ha convertido en una de las mejores noticias. Ha cumplido con su cometido de dar puntos y el de ayer ante el Girona puede resultar fundamental. Por muchos motivos.