Hasta el balón parado se cae

LA VOZ VIGO

GRADA DE RÍO

JORGE ROPERO - LOF

El Celta, que había dado muestras de solvencia en la defensa de la estrategia, encajó dos tantos en el Bernabéu ante un Real Madrid que lo remató todo.

11 mar 2024 . Actualizado a las 20:37 h.

La defensa de la estrategia era la joya de la corona de Rafa Benítez en el Celta. Su sistema zonal había cortado de raíz un problema endémico con el balón parado, pero en el Santiago Bernabéu, hasta esa pequeña conquista se vino abajo y, además, en los dos goles que decantaron el partido. Pero no solo eso, el Real Madrid lo remató todo por arriba y solo las paradas de Vicente Guaita evitaron que la sangría por ese concepto fuese todavía peor.

Hasta el día de ayer, el Celta había encajado por la vía de la estrategia tres goles, la cifra más baja en muchos años, pero Rüdiger saltó a placer cuantas veces quiso. Cierto es que cuenta con un físico imponente y un salto espectacular, pero nadie le estorbó lo suficiente para dificultárselo. De esa manera llegó el remate que propició el gol de Vinicius para abrir el marcador y el 2-0, con un cabezazo del alemán al palo para acabar después en el fondo de las mallas tras tocar en la espalda de Guaita. Los blancos ganaron nueve duelos aéreos a lo largo de la contienda, tres de ellos, del central berlinés, y otros tantos, de Camavinga.

El Celta también les allanó el camino a los merengues cediendo la friolera de 12 córneres, una decena en la primera mitad, y permitiendo a los blancos disparar en 25 ocasiones, 13 de ellas entre los tres palos. Con semejante sangría, el partido tenía que terminar en goleada salvo milagro.

Con los cuatro tantos encajados en el Bernabéu, el Celta ya suma 43 en contra en los 28 partidos disputados, lo que significa una media de 1,5 por encuentro. En estos momentos, el conjunto vigués es el cuarto más goleado de la liga. Tan solo presentan peores números el Almería y el Granada, los dos últimos clasificados (que superan el medio centenar) y el Villarreal. Fuera de casa, el equipo de Benítez ya ha recibido 26 goles y no deja la portería a cero desde el partido de El Sadar, el último que ganó como visitante.

Recuperar la fiabilidad del balón parado debe ser la primera premisa de cara al partido del próximo domingo en Sevilla ante un rival con muchos centímetros y que también vive de la estrategia, con jugadores como Sergio Ramos o Youssef En-Nesyri.