Madre e hija a las que el padre de la familia hizo socias hace 50 años: «Él no pudo recoger su insignia»

LA VOZ VIGO

GRADA DE RÍO

M. V. F.

Mercedes Gallego Caride y Mercedes Rodríguez Gallego recogieron a la vez el reconocimiento del club vigués,

29 may 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

Mercedes Gallego Caride y Mercedes Rodríguez Gallego son madre e hija, de 93 y 61 años, un caso muy particular entre quienes ayer recogieron sus insignias. No es que una fuera acompañante, sino que las dos estaban en la lista de homenajeadas. «Nos hizo mi padre socias a las dos. En mi caso, toda una vida. Nunca pensamos en darnos de baja, esto es hasta la muerte», dice Mercedes hija. Así fue en el caso de su progenitor.

Porque él falleció hace dos décadas, el mismo año que le correspondía recibir su insignia, pero no pudo llegar a recogerla. «El Celta, para mí, es la sensación de familia. Es un orgullo que te den esta insignia, sobre todo porque a mi padre le hubiera gustado tenerla y no pudo ser», relata al borde del llanto. «Me emociono porque me acuerdo mucho de mi padre», afirma.

Junto a estas dos mujeres estaba su hijo y nieto, respectivamente, Enrique Alexis, de 30 años y también socio durante la mayor parte de su vida y en la actualidad —lo abonaron al nacer y hubo un par de años en que no renovó—. «Mi abuelo fue quien más me lo inculcó. Ahora llevaría 70 años de socio. Veníamos toda la familia: abuelos, tíos, primos... Era como ese momento de la semana en que nos reuníamos y, aunque algunos ya no estén, el momento en que empieza un partido, también es una forma de recordar, reconectar y reenamorarte de esos tiempos de infancia», expresa.

Para él, resultaba muy emotivo ver a su madre y a su abuela siendo merecedoras de este honor celeste. «Es bonito. Que mi abuelo no pudiera recibir la suya y ellas estén aquí haciéndolo es como un homenaje a él, a la persona que nos lo inculcó a todos», explica con una sonrisa de oreja a oreja.