Un mes en el punto de partida

LA VOZ VIGO

GRADA DE RÍO

M.MORALEJO

Cuatro semanas después de finalizar el curso, el Celta no pudo activar la operación de salida y ahora ve alejarse la opción del retorno de Iker Losada

24 jun 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El Celta vive en el día de la marmota. Cuatro semanas después de finalizar la temporada, el conjunto vigués todavía no ha sido capaz de poner en marcha la operación salida y ahora ve cómo su primera opción de mercado, el retorno de Iker Losada, puede estar cerca de esfumarse; de hecho, la agencia Efe anunció en el día de ayer que el de Catoira firmará por cuatro años como jugador del Betis.

La cúpula del Celta asumió desde el primer momento que este es el verano de la paciencia y de no perder los nervios, aun a costa de verse el próximo 3 de julio con más de 30 jugadores dispuestos a iniciar la pretemporada, una estampa que podría repetirse bien entrado julio ya que hasta que finalice la Eurocopa todo apunta que el mercado seguirá igual de parado.

La falta de salidas también supone un freno para cualquier posible incorporación, ya que el vestuario del Celta está hasta los topes. El nombre que sonó con más fuerza hasta la fecha fue el de Iker Losada, una opción reconocida por Marco Garcés en Vigo y Carlos Mouriz en Ferrol, pero el Betis parece haber tomado la delantera para llevarse al atacante formado en la cantera del Celta antes del 30 de junio a cambio de 1,8 millones de euros, la cantidad establecida en la cláusula de rescisión. El catoirense encajaba a la perfección en la idea balompédica de Claudio Giráldez, que lo tuvo la temporada pasada en el filial.

El culebrón Iker Losada comenzó el verano pasado. El de Catoira tenía derecho a ficha del primer equipo por contrato una vez finalizada su etapa de formación, pero el club le propuso que mantuviese la ficha del B a cambio de estar en dinámica de primer equipo y de ser el jugador mejor pagado del filial. Losada declinó la invitación y enseguida se decantó por el Racing de Ferrol, con el que firmó una temporada para enmarcar. En diversas ocasiones, Iker dejó claro que su deseo era volver al Celta algún día, pero sin marcar fecha. Finalmente, se dio el escenario para que fuera por la vía rápida, pero el movimiento del Betis y la falta de concreción del conjunto vigués parecen haber provocado un vuelco a la situación, aunque desde su entorno no se confirma el interés verdiblanco.

Pendientes del desenlace del asunto Iker Losada el conjunto vigués entra en la última semana hábil del ejercicio 23/24 sin ningún movimiento cerrado y sin la necesidad de acometer ninguna venta para cuadrar las cuentas a 30 de junio. La única operación que debe hacerse pública a 30 de junio (el próximo domingo) en el Celta es la compra de Unai Núñez después de finalizar la cesión de dos años por parte del Athletic. Todo indica que el Celta hizo ya el desembolso pertinente, de hecho el presidente del conjunto vasco dijo que el central ya no tenía relación con el club de San Mamés, pero ahora debe hacerse pública la operación. En cuanto a la operación salida, nada anuncia un movimiento inmediato. Gonçalo Paciência y Manu Sánchez son los jugadores que más han sonado, pero sin nada concreto.