Borja Iglesias y un mediocentro, el plan de fichajes previsto por el Celta

X.R.C. VIGO

GRADA DE RÍO

M.MORALEJO

Los vigueses, que rebajarán su límite salarial, buscan al menos siete salidas y contar con una plantilla de 24 jugadores, apostando por la continuidad

13 jul 2024 . Actualizado a las 05:00 h.

El Celta tiene definida su hoja de ruta para la composición de la plantilla de la próxima temporada, con una clara apuesta por la continuidad. El club solo prevé dos fichajes en todo el mercado estival y uno de ellos ya tiene nombre: Borja Iglesias; el otro, demarcación: un mediocentro. Los dos deben formar parte de una plantilla de 24 jugadores, de los cuales 19 tendrán ficha del primer equipo y los cinco restantes deben ser los emergentes que lleguen desde el Celta Fortuna.

Para cuadrar los números, el conjunto vigués prevé dar salida, como mínimo, a siete de los jugadores que tienen contrato en vigor en estos momentos y que no entran en los planes de Claudio Giráldez. Todo, en un contexto de contención, porque después de lo gastado el curso pasado, el Celta tendrá que rebajar su límite salarial de un modo significativo este curso. «Tenemos que ver lo que ha salido», comentó el entrenador, apuntando que deben fichar acorde a los jugadores que han causado baja (Renato Tapia y Strand Larsen).

Giráldez quiere a Borja Iglesias como alternativa a Tasos Douvikas en el frente de ataque. «Es un jugador que conocemos muy bien, tuve la suerte de coincidir un año con él en el Celta B (cuando ejercía de analista de Menéndez) y es un jugador de mi agrado. Ya veremos qué va pasando», comentó el técnico porriñés en su primera comparecencia de la pretemporada.

Toda la escenografía juega a favor de su vuelta a casa. El Celta no esconde que persigue su fichaje, el jugador quiere vestir de celeste y el Betis sabe que tiene que llegar a un acuerdo satisfactorio para todas las partes, porque los futbolistas siempre son los que marcan el camino en materia de fichajes. La principal preocupación del Celta es cómo reaccionará el sector de la afición que en más de una ocasión se ha mostrado crítico con el compostelano, aunque parece un asunto menor que se cura con goles.

El Celta tiene informes del buen trabajo desempeñado por el delantero gallego en el Bayern Leverkusen, pese a su falta de minutos, y en Vigo están convencidos de que puede recuperar su mejor versión. «Hablar de Borja y pensar que no es un jugador de garantías sería equivocarnos», dijo el entrenador.

El ariete será uno de los dos fichajes que tiene previstos el Celta antes del 1 de septiembre. El otro, un mediocentro de perfil por definir en función de las oportunidades que presente el mercado. La planta noble de A Sede asume que recuperar a Gabri Veiga es un imposible y que Santi Comesaña, otro de los que suena todos los veranos, tampoco es factible, ya que el Villarreal lo considera intransferible.

Con este escenario, el trabajo de la dirección deportiva del Celta se debe centrar en la operación salida, que debe alcanzar los siete jugadores para que Claudio Giráldez se quede con un cupo máximo de 24 futbolistas (19 con ficha del A).

Las fichas de Hugo y Damián

En el reparto de las fichas, si fuera posible, tanto Hugo Álvarez como Damián Rodríguez, que en teoría van a ser jugadores del primer equipo a todos los efectos, tendrían licencia del A, igual que Carlos Domínguez y Hugo Sotelo. «Tengo claro que Hugo Álvarez y Damián van a estar en dinámica nuestra», aseguró Giráldez sobre los dos canteranos.

El deseo, que de entrada parece utópico, es que solo tengan ficha del B los que vayan a alternar los dos equipos. Emi Rodríguez, si se lo gana en el campo, podría ser uno de ellos. Fer López, que comienza con el B, otro. Los desvelos de la dirección de fútbol del Celta están centrados en la operación salida: Miguel Baeza se marchó, ya desvinculado del Celta, al Nacional de Madeira portugués, y Carlos Dotor saldrá cedido ya tiene muchas ofertas, pero falta por confirmar si será en Primera o en Segunda.

En cuanto a las ventas, el jugador con más mercado en estos momentos es Manu Sánchez, aunque no parece que el Betis vaya a ser su destino, lo que desliga por completo su movimiento de la operación de Borja Iglesias. Por el contrario, se cayó la opción de que Paciência pueda jugar en el fútbol mexicano y el Celta le busca nuevo destino.