El entrenador del Celta destaca que el Espanyol, al que visitan este sábado, tiene argumentos para hacer daño a cualquiera pese a su situación en la tabla
29 nov 2024 . Actualizado a las 14:27 h.El entrenador del Celta, Claudio Giráldez, admite que salen reforzados del empate ante el Barcelona, aunque hubiera sido en mayor medida si hubieran sumado los tres puntos. «Hubiera aumentado más la confianza ganar, pero competir contra el líder, ver que eres capaz de meterle mano, estar en el partido, generar más ocasiones y controlar muchas cosas del partido da confianza. Se trata de hacer puntos, que el equipo sea más fiable», señala. En todo caso, deja claro que nunca ha percibido dudas en el vestuario acerca de lo que pueden hacer o conseguir.
En la comparación con rivales como Alavés o Leganés, dice el porriñés que «el Espanyol tiene una forma de ajustarse o jugar distinta». Pero se centra en ellos: No hemos sido capaces de hacer del todo nuestro fútbol, en especial, ante el Alavés el año pasado, pero el equipo es cada vez más completo. Hemos ido a escenarios parecidos y hemos hecho buenos partidos», comenta. Es consciente de que necesitan «hacer más minutos» fuera lo que están mostrando en casa y que también han mostrado en ocasiones a domicilio.
Desde la idea de centrarse en ellos mismos, analizan las fortalezas y debilidades del rival. «Tienen una manera de trabajar buena, el equipo tiene mucha identidad, es reconocible, alegre, tiene maneras de hacerte daño y argumentos para poder ganar a cualquiera. Lo han demostrado, pero no han sido continuos», desgrana al tiempo que incide en que los pericos no han tenido un calendario fácil.
A Giráldez le «gusta que haya entrenadores gallegos en Primera» por la cuenta que le trae, comentaba antes de señalas que no conoce personalmente a Manolo González, pero que le gusta «lo que hace a nivel de trabajo». «Ojalá podamos tener un rato para hablar de fútbol y de Galicia si toca», decía. Sobre el terreno de juego, se centra en «tener claras las debilidades del Espanyol y tener la mente abierta para identificar lo que puede pasar».
Sobre el ajuste táctico que hizo ante el Barcelona, comentó que no era la primera vez y que sí se quedó satisfecho con la apuesta. «Atacar o defender con cuatro lo hicimos en pretemporada y en otros partidos antes, son recursos que tenemos variando altura o amplitud de ciertos jugadores para tener más opciones. Quedé contento contra el Barcelona».
Una vez más, y ante la cómoda posición que ocupa el Celta en la tabla, el preparador tiene claro hacia dónde mirar. «Siempre hacia para arriba, queremos más. Lo que ha pasado hasta ahora nos vale para estar donde estamos y tenemos que intentar conseguir cosas para estar en situaciones mejores», subraya. No huye de que necesitan mejorar a domicilio: «Es una realidad. Muchas veces, el resultado camufla para bien o para mal lo que pasa y parece que el que gana hace más cosas bien o al revés. Hemos sacado puntos sin estar bien y hemos hecho cosas bien fuera».
Valora que ahora llevan cuatro de los últimos nueve lejos de Balaídos: «Tampoco está tan mal esa media. La intención no es pensar en lo que pasó, sino ganar el partido». Además, admite que a los jugadores les puede pesar en cierta medida la responsabilidad de querer ganar fuera, pero prefiere verlo de otra manera: «Sí, hay momentos en que piensas que una cosa que tienes negativa es una debilidad y puede ser una fortaleza si eres capaz de conseguir que el equipo se una y olvide lo que pasó antes».
No despeja la duda de si jugará Borja Iglesias o Tasos Douvikas, pero apunta: «No tiene que ver con lo que hace el rival y sí tiene que ver con lo que hace el rival. Los dos tienen capacidad. Intentamos dominar, tener el control, más ocasiones que el rival, más tiros». Otro nombre propio por el que se le preguntó fue Damián Rodríguez, con escaso protagonismo de un tiempo a esta parte: «Es un diez en el trabajo todos los días. Otros compañeros han dado un paso adelante y tiene que esperar su oportunidad pronto. Confío mucho en él, no hace falta que lo diga, volverá a jugar, no me cabe duda. Tiene nivel para ello», recordando que dijo algo similar sobre Carlos Domínguez en la previa anterior.
Preguntado por la renovación de Hugo Álvarez, la celebra, destacando que está siendo un jugador importante. «El club tiene que pensar en ser cada vez más fuerte en los años venideros, generar algo sostenible que pueda mantener el nivel y mejorarlo, y la aparición de los canteranos es ilusionante para todos. Están dando los pasos correctos». Comenta que los canteranos han cometido errores, pero también han acertado mucho. «Hugo me gusta mucho, me alegro por él y por mí, que lo tengo a mi lado».
En cuanto a Ilaix Moriba y si ya ha mostrado su mejor versión, recalca Claudio Giráldez que «lo mejor de él está por ver». Considera que «su día a día es un espectáculo», al igual que la manera en que ha encajado en el vestuario y lo querido que es por sus compañeros.