
El presupuesto rondará los 116 millones, un incremento que viene dado por la previsión de 10 millones por la Europa League que contempla la LFP
03 sep 2025 . Actualizado a las 05:00 h.La plantilla más cara de la historia. Ese es el mensaje del Celta tras el cierre de mercado estival. La temporada pasada, el conjunto vigués disponía de un tope salarial de 77 millones, de los que consumió algo más de 74 y este curso, dispara ese concepto hasta los 87,6, doce millones más. Ese mayor límite lo consigue con una previsión de ingreso adicional de 10 millones en la Europa League, según el dictamen de la LFP y también tiene incidencia directa en el presupuesto, que rondará los 116 millones. Eso significa que la plantilla del primer equipo se lleva el 75,5 % de los gastos previstos por el club. En las grandes cifras, destaca que los cuatro jugadores que el Celta tiene cedidos se llevan alrededor del 10 % del límite (unos ocho millones). Hasta la fecha, la cumbre del techo salarial celeste estaba en 81,2 del mercado invernal de la 23/24 (con Rafa Benítez).
«Se sube considerablemente el límite salarial. Se aplicó todo el límite», comentó Marco Garcés, el director de fútbol, en su comparecencia para analizar un mercado que se cierra para el Celta con «la plantilla más cara de su historia». Porque el conjunto vigués consiguió su objetivo de retener a la gran mayoría de los jugadores que hicieron posible la vuelta a Europa. «La guinda, para mí, fue conservar el pastel. Tuvimos que resistir ofertas importantes por jugadores importantes que se constituyen como parte fundamental», comentó Garcés. Williot Swedberg, Carl Starfelt y Óscar Mingueza tuvieron propuestas a lo largo del verano y decidieron quedarse. También Jones El-Abdellaoui.
El único que no tenía billete de salida y partió fue Fer López. «Aceptamos una propuesta que fue beneficiosa para toda las partes y que nos permitió poner en orden los números y no reportar pérdidas ni ser acreedores a los intereses que llevan esas pérdidas», precisó el ejecutivo celeste, que no escondió que clubes como el Celta, para vivir fuera de los números rojos, necesitan hacer una gran venta cada año. «Siempre tenemos necesidades económicas, el club hace plantillas por encima de lo que pueda producir y entonces tienes que estar vendiendo constantemente». Fer López reportó un ingreso de 23 millones y con eso dinero el club pudo comprar a Ilaix Moriba, Ferran Jutglà, Borja Iglesias y pagar la cesión de Bryan Zaragoza y le quedaron unos nueve millones de superávit para cuadrar las cuentas de la temporada anterior.
Al margen de las compras y las correspondientes indemnizaciones, el incremento del límite salarial viene dado principalmente por los sueldos, que suben considerablemente teniendo en cuenta el tipo de jugadores fichados. La escala salarial se disparó.
En cuanto a la confección de la plantilla, Garcés está contento y sostiene que mejora la del curso pasado: «Sin menospreciar a la que teníamos el año pasado, me parece que esta es una plantilla más completa, más redonda. Me gusta mucho», reconociendo que 28 pueden ser multitud y que falta un enganche, pero ve soluciones dentro: «Siempre podrías dividir más el átomo y decir que falta un perfil específico, pero hay que generar ventanas para los canteranos. Tengo mucha confianza en la cantera». No descarta que pueda salir algún jugador en fecha próxima.