Capitana celeste nada más llegar

LA VOZ VIGO

GRADA DE RÍO

XOÁN CARLOS GIL

Cuquejo está llamada a ser un peso pesado en el vestuario de As Celtas, que ve como «un superproyecto» que hoy inicia la liga en Segunda Federación

06 sep 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Nerea González Cuquejo, Cuque (A Coruña, 1998), pasa a ser una de las veteranas de de As Celtas. Llegada este verano, la experimentada centrocampista es una de las capitanas, tras Lara Martínez, María Figueroa y Muñi, lo que confirma que está llamada a tener mucho peso en el vestuario. «No me lo esperaba. El cuerpo técnico nos dijo que tres iban a ser por elección de la plantilla y una, de ellos. Supongo que salí por las compañeras, pero de cualquier manera, lo asumo feliz y agradecida, intentando dar lo mejor de mí», señala.

Además, la futbolista confiesa que «líder iba a ser igual», porque es uno de sus rasgos distintivos. «Va conmigo, con mi carácter», cuenta. Y asume que su experiencia en Segunda Federación también es un plus que le toca aportar. «Llevo muchos años trotando por clubes e intento dar el máximo de mí para el equipo, para que mis compis estén bien y aprendan de mí lo poquito que sé, que tampoco es gran cosa», señala quitando importancia a una trayectoria que comenzó en el Orzán y que luego le ha llevado a Victoria, Oviedo, León, Friol, Burgos y, los dos últimos años, Villalonga.

La propuesta del Celta, «en casiña y con un proyecto muy chulo», le «llamó la atención» desde el primer momento y era algo que «no quería perder». «No tengo el agobio que tenía hace diez años por decir que sí a la primera propuesta que viene. Nunca está de más escucharlo todo y esta me pareció muy interesante», argumenta. Desde fuera, As Celtas le parecía «un superproyecto» y lo ha confirmado. «El Celta es ahora mismo el primer equipo de Galicia, era meganecesario para el fútbol femenino que se creara y se está haciendo muy bien», subraya.

Cuque ya conocía al coordinador de As Celtas, Humberto Lede, así como a la que ahora es su entrenadora, Vicky Vázquez, de la época en que la viguesa jugaba en el El Olivo; también a muchas jugadoras, siendo Muñi con la que más recientemente había coincidido. «Conozco a bastantes de otros clubes o incluso de la selección. Somos casi todas gallegas y acabas sabiendo quiénes son», comenta. Pero es lo de menos: «No me cuesta relacionarme y adaptarme».

Duelo de recién ascendidos

El balón empieza a rodar para As Celtas en la tarde de este sábado frente al Bizkerre, un recién ascendido como ellas. «Creo que es indiferente. Ellas son de Euskadi, son duras y vendrá a por todas. Pero nosotras jugamos en casa, tenemos que dar la cara por nuestra gente y tratar de que nos sigan viniendo a ver. Estamos muy ilusionadas», dice de cara a este inicio. Ya pudo conocer a la afición en A Madroa en el partido de presentación frente al Oporto. «Ya las había venido a ver a algún partido el año pasado y es súper chulo que se acerque tanta gente. Sientes que te valoran y que les gusta lo que ven, porque si no, no vendrían», plantea.

La pretemporada le ha dejado buenas sensaciones, partiendo de que «había que encajar piezas» y han ido «evolucionando en cada entrenamiento». «Nos encontramos bien para afrontar este partido, con muchas ganas de empezar con buen pie», anhela. Tampoco oculta que le gustaría verse en el primer once, «como a todas», pero destaca el nivel del equipo y lo bien que han competido en este período de preparación. «Lo que tenga que ser, que sea. Si no juego de inicio y salgo desde el banquillo, intentaré aportar también todo lo que pueda», se compromete.

Muy gallega

Aunque natural de A Coruña, Cuque, que nunca jugó en el Deportivo, se define como «muy gallega» y tanto ella como su entorno han acogido con naturalidad la posibilidad de jugar en el Celta. «Siempre tiro antes por la tierra que por cualquier equipo. Estoy encantada de que el Celta haya querido contar conmigo y de estar aquí», proclama una futbolista a la que le gustaba el balón «desde que era más grande» que ella.

Solo un año en su carrera ha podido dedicarse en exclusiva al fútbol y el empleo fue otro reclamo para recalar en As Celtas. Acaba de comenzar a trabajar para uno de los patrocinadores del club. Doble nueva aventura.