Javi Domínguez: «Aprendí mucho en Vigo, guardo un gran recuerdo»

MÍRIAM V. F. VIGO / LA VOZ

GRADA DE RÍO

A. D. MÉRIDA

Orgulloso de sus excompañeros célticos que están en Primera, cree que es un buen momento para medirse al filial celeste

12 sep 2025 . Actualizado a las 05:00 h.

Javi Domínguez (Madrid, 2001), jugador del Celta B entre el 2022 y 2024, milita en el Mérida, rival del cuadro de Fredi Álvarez este fin de semanas. Pero serán pocos con los que se reencuentre en un partido para él especial, porque muchos de aquellos compañeros están hoy en el primer equipo. Su camino ha sido otro, pero habla con gran cariño de su paso por Vigo y, en lo deportivo, cree que es buen momento para medirse a un filial en construcción.

— ¿Qué tal se está encontrando en esta nueva etapa en el Mérida?

—Bien, contento. Sí que es verdad que está yendo poco a poco el club, pero se están dando pasos hacia adelante.

—¿Qué le sedujo de este proyecto tras recuperar el protagonismo en el Real Unión de Irún, pero no poder mantener la categoría?

—La situación no fue idónea en lo colectivo, aunque volvía coger bastantes minutos en la categoría. Se me propuso esta opción del Mérida, que el año pasado estuvo en play-off, a punto de pasar a la final, y es un club que está haciendo las cosas bien, se está haciendo poco a poco y con buena letra, que es como hay que hacer las cosas.

—Esta jornada reciben al Celta Fortuna. ¿Sigue siendo especial para usted o en menor medida según pasa el tiempo?

—Sí que lo sigue siendo, sobre todo cuando coincides con excompañeros. Para mí, jugar contra el Celta es algo bonito. He pasado dos años de mi vida allí, el club me han tratado muy bien tanto en el momento, dos años que he estado, como también cuando me he ido y reencontrarse con gente que has compartido vestuario es bonito.

—¿Qué balance hace de esas dos temporadas como céltico?

—Muy bueno. Viví experiencias muy bonitas, incluso alternando con el primer equipo, sobre todo en la segunda temporada. Aprendí mucho, esa etapa me enseñó cómo vivir muchas circunstancias y guardo un recuerdo bonito tanto del club como de la ciudad y de la gente con que me encontré allí. En lo deportivo, fue un crecimiento brutal, porque teníamos equipazos los dos años, hicimos play-off y en lo personal, pasé circunstancias mejores y peores y de todo se aprende en esta vida.

—¿Cuál es el mejor recuerdo que le queda de su paso por Vigo?

—Los compañeros, la gente, la afición, la ciudad… Tengo un recuerdo increíble, muy bonito, que siempre conservaré. Y también mi familia, mis amigos, los míos, estaremos siempre muy agradecidos a esta ciudad, a su gente y a un club que es muy grande.

—Aunque no llegó a debutar, sí vivió varias convocatorias en Primera. ¿Cómo las vivió?

—El primer año con Carlos Carvalhal, fui bastantes veces convocado, y el segundo, con Rafa Benítez, también. No tuve ocasión de debutar porque las circunstancias del primer equipo en ese momento no eran las idóneas, pero fue una experiencia bonita y de aprendizaje.

—Mencionaba a Carvalhal y Benítez, ¿qué huella le dejó cada uno de ellos?

—Con Carvalhal tuve menos trato personal, pero me enseñaron mucho tanto él como su cuerpo técnico en aspectos defensivos y con balón, y luego, con Rafa Benítez sí que tuve más trato personal y como persona muy bien y como entrenador, su trayectoria habla por sí sola.

—¿Le quedó esa espinita de no haber llegado a tener minutos?

—Sí, pero siempre he pensado que todo en la vida pasa por algo. Si no fue en ese momento, seguramente será en otro y ya está.

—¿Cómo ve a este Celta Fortuna tan joven y ya con pocos supervivientes de su etapa dos años después?

—La idea me parece buena. Fredi es un buen técnico que da continuidad a lo que pide Giráldez y tienen jugadores con mucha proyección. De mi etapa quedan Coke Carrillo, Meixús, Dela, Joel López… Son futbolistas top y siempre que volví a coincidir con ellos en contra les dije que aprovechen la oportunidad para dar el máximo en el día a día del filial, porque tienen muy cerca la primera División con el primer equipo, que está utilizando muchos jugadores de la cantera y del filial.

—¿Cómo se sintió la temporada pasada ante el Celta B?

—Fue bonito, sobre todo la vuelta a Barreiro, porque es más acogedor y familiar el ambiente que en Balaídos. Creo que tanto el cuerpo técnico como los compañeros con los que coincidí me tiene bastante cariño y respeto y yo hacia ellos, igual o más, así que fue emotivo.

—En el último once del primer equipo había siete jugadores que fueron compañeros suyos. ¿Qué piensa al verlos ahí?

—Siento orgullo de verles crecer, dar pasos hacia adelante y representar a un club como el Celta de la manera que lo están haciendo. Ellos saben mejor que nadie lo que significa el Celta y creo que este año tienen una temporada bonita por delante, ilusionante con la Europa League, y estoy convencido de que van a dar la talla.

—Volviendo a este sábado, ¿habla con sus compañeros de lo que cree que se van a encontrar?

—Sí, por mi pasado en el Celta, sí que me preguntan sobre la forma de jugar. Es un equipo que lo hace muy bien, siguiendo las directrices de Fredi, teniendo muy claro a lo que juegan, intentando buscar superioridad desde atrás y, a partir de ahí, llegar a tres cuartos. Arriba tienen gente muy buena, muy desequilibrante, y en eso estamos trabajando esta semana, para contrarrestarlos.

—¿Les dice algo que el filial aún no haya ganado en estas dos primeras jornadas?

—No. Ellos tienen que estar tranquilos, es un inicio normal en un filial, en un equipo tan joven. Creo que están haciendo bien las cosas y pronto se darán los resultados. Es normal que no sean regulares al principio, porque hay muchos chavales que se están adaptando a la categoría, donde tienen duelos con gente de mucha más experiencia. A un equipo como el nuestro le viene bien encontrarse con ellos ahora.