El futbolista del Celta no logró retomar el nivel previo a la lesión que sufrió el 14 de octubre del 2023 con Ghana
14 oct 2025 . Actualizado a las 23:26 h.El 14 de octubre del 2023 marca un antes y un después en la vida y en la carrera del futbolista del Celta Joseph Aidoo. Aquel sábado, en la madrugada española, la selección de su país y con la que llevaba años siendo un habitual, Ghana, jugaba un amistoso frente a México en la fecha FIFA de este mes. El central fue titular, pero tuvo que abandonar el partido todavía en el tramo inicial por una lesión que no tenía buena pinta. Enseguida aparecían sus primeras imágenes con muletas y, a su vuelta a Vigo, su club confirmaba los peores pronósticos: rotura de ligamento cruzado. Una dolencia siempre complicada para cualquier deportista que, en su caso, y pese a tener el alta desde hace más de un año, no le ha permitido hasta la fecha volver a ser el mismo.
Todo el bagaje de Aidoo en Primera División como céltico desde entonces se reduce a los pocos minutos que jugó en el inicio de la temporada 2024/2025 frente a un Valladolid que, precisamente, sería su club de destino en el momento de salir cedido el pasado enero. Allí sí tuvo algunos minutos, con parones entre medias por nuevos problemas físicos de menor relevancia y sin conseguir acercarse a su nivel. Participó en ocho partidos, seis como titular, sumando 583 minutos y viviendo un descenso con el conjunto pucelano. A su vuelta, y pese a la invitación del club a buscar un nuevo destino, el defensa decidió permanecer en Vigo y no ha entrado en una sola convocatoria oficial.
La semana pasada, en el amistoso solidario Xuntos contra o lume, volvió a pisar el césped de Balaídos más de un año después. Sus últimos minutos con el equipo se remontaban a dos encuentros correspondientes a las primeras rondas de la pasada edición de la Copa del Rey: 90 minutos ante el San Pedro (5-0) y 70 frente al Salamanca CF UDS. Aunque su cesión no se concretó hasta finales de enero, ya no estuvo ni frente al Racing de Santander ni ante el Real Madrid, equipo ante el que cayeron los de Claudio Giráldez. Está por ver si este año repite en Copa —el debut será el 30 de octubre ante el humilde Puerto de Vega— tras no haber tenido hueco entre los inscritos en la Europa League.
En julio del 2024, con el alta y volviendo a ejercitarse con el grupo, Aidoo, que reaparecería en un amistoso en Mos días después, hablaba para los medios del club del proceso que había vivido: «Ha sido realmente difícil», reconocía sin perder su característica sonrisa. Por aquel entonces, estaba feliz de volver a entrenar con el grupo y era un momento para la esperanza. Muy emocionado, hablaba de la ayuda recibida desde el Celta y del aprendizaje de cara a «seguir luchando y no rendirse», algo que ha querido seguir haciendo en Vigo en vez de probar
El momento actual
Las últimas veces que el entrenador del Celta se refirió a la situación de Aidoo fue en agosto, cuando comentó que él y Cervi no entraban en las convocatorias porque no habían podido completar la pretemporada por problemas físicos, pues el ghanés arrastró molestias en el gemelo derecho por las que pasó algunos días por el parte médico. Durante el período de la pasada campaña en que lo tuvo a sus órdenes —hasta enero— aludió varias veces al factor mental que estaba jugando en su contra: «Es una posición sensible, tienes que estar confiado tú y tiene que confiar todo el mundo en ti y no estamos en ese momento», decía en noviembre. Y en la misma línea, apuntaba en enero: «No se ha sentido preparado en muchos momentos. No es fácil empezar en esa situación sin tener minutos, sin continuidad», incidiendo en que es un jugador que le gusta «cuando está a su mejor nivel» . El problema es que, dos años después del traspié, no termina de reencontrarse.