El colectivo celtista de la localidad alicantina nació como homenaje a un celtista fallecido
28 ene 2016 . Actualizado a las 19:59 h.Óscar Prieto y Sergio Cortés tenían algo especial entre los vecinos Alcoy que muy poca gente compartía. Por eso cuando se conocieron y supieron que ambos eran celtistas, la idea de formar una peña sobrevoló sus cabezas enseguida. «Por lo menos ya somos dos», cuenta Sergio que exclamaron. Él es hoy el presidente de una peña que su amigo no pudo ver, pues la fundó en homenaje a su compañero de fatigas celtistas después de que este falleciera con solo 18 años.
«La madre de Óscar empezó a trabajar donde lo hacía yo y un día hablando me comentó que su hijo era celtista, porque su padre era de Vigo. En mi caso, me gustaba Gudelj desde que tengo uso de razón futbolística y me aficioné por él», cuenta Sergio. Forjaron una gran amistad que llevó a Sergio a formar la peña hace casi dos años en memoria de su amigo. Por eso el colectivo recibe el nombre de Peña Alcoyana Óscar Prieto.
Lo primero que hizo el presidente fue hablar con la madre de su amigo y pedirle autorización para sacar adelante el proyecto. «Se puso a llorar y me dijo que adelante, que era el mejor homenaje posible para un celtista hasta la médula como era su hijo», recuerda Sergio. Los primeros números se reservaron para los hermanos y demás familiares del chico. No son muchos, pero tampoco se consideran en absoluto bichos raros. «Hemos hecho mucho ruido, así que ya nos conoce todo el mundo», relata orgulloso.
Celtistas de los de verdad, de los que sienten pasión por el equipo, Sergio calcula que serán unos diez. Sin embargo, cuentan con otra figura que llaman simpatizantes y que son las personas próximas que se han animado a pagar una cuota vitalicia de 10 euros. «Aparte de la familia de Óscar y de mí, tenemos un par de personas de Vigo que también son muy aficionadas y que se han unido a nosotros», dice.
Además, el propio Sergio ha aportado a su mujer, que «después de tantos años, aunque no es muy futbolera, es una celtista más». Y, hace solo unos meses, ambos han incorporado a la socia más joven, un bebé celtista llamado Indira. «Está calentando la garganta preparándose para el partido del Calderón», cuenta Sergio al otro lado del teléfono mientras se escucha el llanto de su niña, acostumbrada ya a vestir todo tipo de prendas de color celeste desde su primer día de vida.
Si algo ha caracterizado a la Peña Alcoyana Óscar Prieto más allá de su celtismo es la faceta solidaria. La sacan a relucir en el Memorial Óscar Prieto que organizan cada año, pero también en otras actividades como partidos benéficos o recogidas de alimentos. También ha sido frecuente su colaboración con el club local, el Alcoyano. «En la inauguración nos trajeron a Rubén Martínez, que había sido jugador del Celta B, y siempre nos ayudan en todo lo que pueden». Sergio y el resto de miembros también tienen simpatía por el equipo local, y de hecho él llegó a jugar en las categorías inferiores. «Cuando jugó el Celta aquí fui con la camiseta de un equipo y la bufanda del otro», confiesa.
Los miembros de la peña se reúnen en su sede para los partidos y realizan más de un desplazamiento a los campos cercanos que visita el equipo, como los de Villarreal o Valencia. «Ojalá nos clasifiquemos para Copa y nos toque el Valencia, que por pedir...». Tienen especial relación con la peña Célticos do Sudeste, con la que han organizado también más de un viaje y otras actividades conjuntas.
El hecho de ser una peña alcoyana, además, les marca en un sentido que a Sergio siempre les gusta recalcar. «Yo el sábado, hasta con el 3-0 contr ael Rayo mantenía la esperanza de remontar. Eso es porque la moral del Alcoyano está con el Celta, eso no falla nunca».