Las amenazas norcoreana e iraní centran la cumbre sobre seguridad nuclear
27 mar 2012 . Actualizado a las 07:00 h.Barack Obama prometió ayer una nueva reducción del arsenal atómico en el primer día de la segunda Cumbre sobre Seguridad Nuclear, dominada por Irán y el proyecto de Corea del Norte de lanzar un satélite civil, que es visto como un ensayo encubierto de un misil de largo alcance.
En un discurso en la Universidad Hankuk, previo a la cumbre -que reúne a dirigentes de 53 países, entre ellos España-, el presidente aprovechó para anunciar que Washington quiere negociar con Moscú reducir no solo cabezas nucleares estratégicas, sino también armas tácticas, algo que planteará a Vladimir Putin en mayo en el G-8. En su opinión, con más de 1.500 armas nucleares desplegadas y 5.000 ojivas, Estados Unidos tiene más arsenal del que necesita.
En una reunión bilateral, Obama y el presidente saliente ruso, Dmitri Medvédev, reconocieron las diferencias y tensiones entre los dos en temas como la crisis siria y el escudo antimisiles.
Obama se reunió también ayer con el presidente chino Hu Jintao, después de que la víspera pidiera a Pekín que se pusiera serio con su aliado norcoreano.
Hu y Obama acordaron coordinarse ante el plan de Pyongyang de lanzar un cohete, según dijo a la prensa Ben Rhodes, consejero adjunto de Seguridad Nacional. Seúl anunció ayer que destruirá en vuelo el cohete norcoreano si entra en su territorio. Japón hizo la misma advertencia la semana pasada.
Obama aprovechó también para advertir a Irán de que se le acaba el tiempo para resolver diplomáticamente el pulso en torno a su programa nuclear.
Los líderes de la cumbre saludaron los avances logrados desde la primera cumbre de Washington en el 2010, que buscaba evitar que material radiactivo caiga en manos terroristas. Ayer, Bélgica, Francia y Holanda reafirmaron su compromiso de reducir en el 2015 la producción para uso médico de uranio altamente enriquecido.