La oposición denuncia una masacre con cincuenta y un muertos cerca de Damasco

DPA

INTERNACIONAL

No ha sido posible contrastar por ahora la veracidad de la denuncia

29 jun 2012 . Actualizado a las 19:39 h.

Las tropas del régimen de Bashar al Asad mataron en el suburbio de Duma, cerca de Damasco, a 51 personas, entre ellas mujeres y niños, aseguraron hoy fuentes de la oposición siria.

Los activistas colgaron en Internet imágenes que muestran cadáveres envueltos en telas blancas y con manchas de sangre. No ha sido posible contrastar por ahora la veracidad de la denuncia. Diez de las víctimas habrían sido asesinadas en un puesto de control de una milicia leal al régimen cuando intentaban huir de la ciudad.

El jueves murieron en todo el país 180 personas, entre ellas 117 civiles, según los rebeldes, que además aseguraron hoy haber secuestrado a un coronel y un brigadier del ejército.

Como antecedente, la masacre de 108 civiles en mayo en Hula, en la provincia de Homs, generó indignación a nivel internacional. Los observadores de la ONU no pudieron establecer sin lugar a dudas quién la cometió, pero apuntan a las tropas o milicias afines al régimen.

En tanto, Siria reforzó su presencia militar cerca de la frontera turca, informaron rebeldes, un día después de que Turquía afirmara que había desplegado soldados en su frontera con Siria.

En una entrevista con la televisión estatal iraní que fue emitida el jueves, el presidente Al Asad acusa a los rebeldes del fracaso de la mediación del enviado internacional Kofi Annan para acabar con el conflicto.

«Nadie conoce mejor la situación en Siria que la propia Siria, así que no aceptaremos soluciones externas, ya sea que vengan de grandes potencias o de países amigos», aseguró el mandatario.

Al Asad elogió a su principal aliado en la región, Irán, y lo describió como uno de los «gobiernos sabios» que lo están ayudando a proteger la «soberanía y la estabilidad» de Siria.

En la poco habitual entrevista, Al Asad declaró asimismo que no siente hostilidad hacia Turquía pese al apoyo que da a los rebeldes, pero no se disculpó por el derribo por parte de sus fuerzas de un avión del país vecino.

Pese a la insistencia de Rusia, Irán no fue invitado a la conferencia de mañana sábado en Ginebra en la que se hablará de la situación en Siria, debido a la fuerte oposición por parte de Estados Unidos.

El portavoz del Ministerio el Exterior iraní, Ramin Mehmanparast, afirmó hoy al respecto citado por la agencia Fars: «No deberíamos dejar que países de fuera de esta región tomen decisiones precipitadas como acciones militares y pongan en peligro la seguridad de la región».

Al encuentro del llamado Grupo de Acción para Siria asistirán los ministros del Exterior de los cinco países con poder de veto en el Consejo de Seguridad (EE.UU., Rusia, China, Francia y Reino Unido), los de Irak, Kuwait y Qatar, así como la representante de Política Exterior de la Unión Europea (UE), Catherine Ashton.

La reunión se basa en una propuesta de Annan en la que según lo que ha trascendido el mediador propone un gobierno de transición con miembros del actual gobierno y de la oposición. Excluiría a aquellos cuya presencia «socave la credibilidad de la transición y ponga en peligro la estabilidad y reconciliación».

Por su parte, Rusia también criticó hoy en Ginebra a Estados Unidos por su bloqueo a la participación de Irán. Washington mostró una «oposición insuperable», según informó hoy el Ministerio del Exterior en Moscú. El ministro del Exterior, Sergei Lavrov, se reunirá esta noche en San Petersburgo con su colega estadounidense, Hillary Clinton.

En la declaración se afirmó que, además de Irán, aliado de Siria, deben participar en la conferencia Arabia Saudí, que apoya a los rebeldes, y los vecinos directos Líbano y Jordania. De todas formas, se añade, el único que puede decidir sobre su futuro es el pueblo sirio.

La situación está pendiente ahora sobre todo del encuentro esta tarde en San Petersburgo entre Lavrov y Clinton.

Fuentes de las negociaciones en Ginebra señalaron que los rusos se oponen a cualquier fórmula que exija que Al Asad tenga que renunciar, con lo cual rechazan por el momento la propuesta de Annan.

Moscú pide cambios en el texto porque ve en su formulación el intento de excluir al mandatario sirio desde el principio.

Por su parte, los líderes de la Unión Europea (UE) llamaron hoy a la comunidad internacional a aumentar la presión sobre Siria aplicando más sanciones bajo un procedimiento de la ONU que podría llevar en última instancia a una acción militar.

«El Consejo Europeo llamó a una acción unificada por parte del Consejo de Seguridad para presionar de forma más fuerte y efectiva, incluyendo la adopción de sanciones más amplias bajo el capítulo siete», dijeron los 27 líderes de la UE tras la cumbre en Bruselas.

El capítulo siete prevé primero sanciones no militares -como el congelamiento de relaciones económicas y diplomáticas- pero si las considera «inadecuadas», allana el camino para una respuesta militar.