La bajada del paro da aire a Obama tras perder el debate

Victoria toro NUEVA YORK / CORRESPONSAL

INTERNACIONAL

Romney admite como «completamente equivocado» su comentario sobre el 47 % de los votantes demócratas

06 oct 2012 . Actualizado a las 07:00 h.

Por primera vez en casi cuatro años, el desempleo cayó por debajo del 8 % en Estados Unidos, lo que, a cinco semanas de las elecciones presidenciales, supone un verdadero balón de oxígeno para Barack Obama.

El Departamento de Trabajo hace públicos los datos de empleo mensuales el primer viernes de cada mes. Lo que anunció ayer es que el empleo creció durante septiembre en 114.000 puestos de trabajo que redujeron la tasa en un 0,3 %, es decir, desde el 8,1 % previo hasta el 7,8 % actual.

Los datos fueron inmediatamente comentados por ambas campañas. Mientras la demócrata los veía como una prueba de que la política de Obama funciona, los republicanos ponían esa afirmación en duda. Romney aseguró que se trataba de una «recuperación irreal» y destacaba el hecho de que en cada uno de los dos últimos meses se han creado menos puestos de trabajo que el mes previo.

Por su parte, Obama aseguró ayer en un acto electoral en la Universidad de George Mason. que «hemos realizado demasiados progresos para volver a las políticas que nos llevaron a la crisis.

Antes de la cita electoral del 6 de noviembre queda todavía otro informe sobre esta cuestión, el que se conocerá el viernes 2 de noviembre sobre cómo han ido las cosas para el trabajo este octubre. Pero los analistas creen que ese último informe tendrá mucho menos impacto a solo cuatro días de las elecciones, cuando la decisión sobre el voto ya está tomada.

«Mal de altura»

El dato de ayer, sin embargo, sí puede influir mucho más a la hora de aumentar la confianza de los votantes en la capacidad de Obama para gestionar la economía del país. Más aún después del debate del miércoles, en el que ofreció una imagen apagada y cansada, mientras Romney actuó con brillantez.

En cuanto a las especulaciones sobre qué le ocurrió al presidente esa noche, el exvicepresidente Al Gore aseguró en una entrevista que Obama podría haber sufrido mal de altura.

La ciudad en la que se celebró el debate, Denver, está a 1.500 metros sobre el nivel del mar. Romney llegó allí tres días antes pero Obama aterrizó en la ciudad de Colorado pocas horas antes de la confrontación. «Cuando estás a una altitud de 1.500 metros y solo tienes unas horas para adaptarte? No sé? Quizá influyó», aseguró Gore. El llamado mal de altura que provoca dolor de cabeza y cansancio podría ser una explicación a la imagen tan apagada que mostró Obama.

Una de las críticas más repetidas a Obama por su actuación en ese debate fue que no utilizara contra Romney la frase de este sobre el 47 % de los estadounidenses que no pagan impuestos federales y de los que dijo que no se ocuparía de ellos. Quizá para impedir que el demócrata sí la utilice en el próximo debate, Romney se refirió en la noche del jueves a ella durante una entrevista en la cadena Fox. Sí antes la había defendido con la explicación de que solo le parecía que no había sido «muy elegante», ahora la rechaza rotundamente como «completamente equivocada».