Los islamistas atrincherados en Argelia, dispuestos a morir y matar
INTERNACIONAL
Exigen a Francia poner fin a la guerra de Mali y que EE.UU. libere a dos destacados yihadistas
19 ene 2013 . Actualizado a las 07:00 h.La operación de las fuerzas especiales argelinas continuaba ayer en el campo de gas donde permanecían atrincherados varios islamistas ligados a Al Qaida con algunos rehenes, tras el asalto que llevaron a cabo el miércoles cuando retuvieron a decenas de extranjeros y a cientos de argelinos. El enfrentamiento parecía anoche inevitable y se preveía un elevado número de víctimas.
«Estamos dispuestos a morir y a matar al máximo número de personas», dijo Knaoui Sidi, un notable de la región citado por el sitio argelino TSA a través del que se comunican los yihadistas, después de una tentativa vana de negociaciones.
Según el diario argelino El Watan, los terroristas exigen «negociar» con Francia el fin de la guerra en Mali y proponen la liberación de norteamericanos a cambio de dos islamistas detenidos en EE.UU.: el clérigo egipcio Omar Abdel Rahmane, vinculado al atentado contra el World Trade Center de Nueva York en 1993, y un científico pakistaní, Aafia Siddiqui.
«Estados Unidos no negocia con terroristas», contestó tajante la portavoz del Departamento de Estado, Victoria Nuland.
La confusión y el caos siguen siendo la nota predominante, de ahí los recelos de varios países con nacionales retenidos.
Los yihadistas atrincherados con explosivos tendrían retenidos todavía a siete extranjeros (30 según otras fuentes) en la fábrica, donde provocaron una explosión para repeler a los militares. Serían tres belgas, dos estadounidenses, un japonés y un británico, según islamistas que dicen proceder de Níger. Fuerzas militares hablan de 60 desaparecidos de los 132 extranjeros. Otras fuentes apuntan a 573 los locales liberados y cerca de 100 de los 132 extranjeros.
Fuerzas especiales (GIS) aseguran haber capturado a un terrorista. Habría dicho que eran 32 los asaltantes.
Al malestar expresado por Tokio, Londres, Oslo y Washington, por no haber sido informadas por Argel de su intervención, no se sumó París, pero todas son partidarias de «darle prioridad a la seguridad de los rehenes». Ayer, el ministro de Exteriores argelino recibió a los embajadores de EE.UU., Francia, el Reino Unido, Japón, Austria, Noruega, Canadá y la UE para limar asperezas y «actualizar las informaciones».
Antes, Japón había transmitido al embajador argelino su preocupación por 14 nipones. La empresa JGC -con 78 empleados, incluidos los 17 nipones- confirmó que seis están bien: dos filipinos y un rumano, además de tres nipones.
David Cameron afirmó que «al menos 30» británicos estaban aún «en peligro». Francia confirmó la muerte de un rehén y el retorno de tres. La noruega Statoil anunció que 9 de sus 17 empleados están a salvo. El primer ministro, Jen Stoltenberg, dijo que el país debe prepararse para «malas noticias». Un portavoz de los islamistas, citado por la agencia ANI, había dicho que murieron 34 rehenes.