Los británicos llenan de flores el barco de la diputada, el lugar donde fue asesinada y Westminster
18 jun 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Las muestras de dolor y las ofrendas florales se repitieron el viernes en diferentes puntos del Reino Unido para recordar a la diputada laborista Jo Cox y agradecer su implicación sirviendo a la ciudadanía. Una de las más emocionantes fue la que tuvo lugar a las puertas de la biblioteca donde se produjo su asesinato. Hasta allí se acercó Victoria Hills para depositar varias flores y recordar a Cox. «A pesar de que mucha gente no la conocía personalmente, creo que su nombre era familiar para muchos en su distrito porque ella era muy auténtica», destacó.
Esta madre de dos hijos explicó que, si bien solo lleva viviendo en Birstall diez años, otras personas que residen en esta localidad de West Yorkshire desde hace mucho más tiempo «hablan de ella y dicen que era una de los nuestros». Allí también se encontraba Colin Frith, un profesor de baile local que intentó ayudar a la diputada y al otro herido en el ataque, un pensionista de 77 años que continúa en el hospital, recuperándose de una puñalada en el estómago. «Fue un escenario de locura. Había sangre que brotaba de la herida del señor y por un momento temí que muriera», explicó Frith, de 28 años, quien se vio sorprendido por el crimen mientras tomaba un té tranquilamente.
«Fue un héroe»
«Espero que se recupere por completo. La gente tiene que saber lo valiente que fue. Se acercó al atacante armado y trató de detenerlo. Es un verdadero héroe».
Otro lugar de peregrinación ciudadana fue la barcaza atracada en el Támesis en la que vivía Cox con su marido e hijos cuando estaba en Londres. Situada en el barrio de Wapping, cerca de Tower Bridge, la embarcación de madera y tonos azules estaba llena de flores y velas que fueron dejando los ciudadanos.
«Es muy triste», lamentaba John Knows, un londinense que criticaba lo sucedido y ensalzaba a la laborista como una buena diputada. «Ella hacía las cosas que quería hacer y ayudaba a mejorar la comunidad. Es una pérdida para todo el mundo».
Mientras, los familiares y amigos de la fallecida decidieron poner en marcha una recaudación de fondos para ayudar a las causas benéficas por las que luchaba Cox, quien trabajó durante años para la organización Oxfam.
La respuesta ciudadana fue inmediata y en apenas cuatro horas recaudaron más de 80.000 euros de los 127.000 a los que se aspira. Una cuantía que irá para el Servicio Voluntario Real, que ayuda a las personas mayores que se encuentran solas en Batley y Spen (circunscripción de Cox); la organización Esperanza frente al Odio, que lucha contra el extremismo y los crímenes de odio, y la Comisión de Cascos Blancos.