Los socialistas se integran en el frente electoral de Mélenchon para las legislativas de junio

asunción serena PARÍS / E. LA VOZ

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El negociador de La Francia Insumisa Manuel Bompard, durante la comparecencia para anunciar el acuerdo con los socialistas
El negociador de La Francia Insumisa Manuel Bompard, durante la comparecencia para anunciar el acuerdo con los socialistas MOHAMMED BADRA | EFE

El programa incluirá la desobediencia a ciertas normas de la UE, la jubilación a los 60 y el salario mínimo de 1.400 euros

05 may 2022 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras el pacto firmado con ecologistas y comunistas, La Francia Insumisa (LFI) ha logrado un «acuerdo de principio» con el Partido Socialista (PS) de cara a las elecciones legislativas del mes de junio, que debe aprobar hoy el consejo nacional de la formación.

Para el líder de la extrema izquierda, Jean-Luc Mélenchon, procedente de las filas socialistas (de donde salió en el 2008), es una gran revancha lograr la unión de la izquierda por primera vez en los últimos 25 años. Con la Nueva Unión Popular Ecológica y Social esperan obtener una mayoría en la Asamblea e impedir que Emmanuel Macron aplique el programa que le ha llevado a renovar el cargo de presidente.

Los últimos escollos en las negociaciones giraban en torno al número de circunscripciones que podían obtener los socialistas. Se han tenido que conformar con 70, frente a las 100 adjudicadas a los ecologistas. Con un 1,75 % de votos en las presidenciales no estaban en posición de exigir.

Igual que ecologistas y comunistas, han aceptado los puntos principales del programa defendido por Mélenchon: la jubilación a los 60 años, el salario mínimo de 1.400 euros, el bloqueo de precios de un centenar de productos o la desobediencia a ciertas normas de la Unión Europea.

Críticas internas

Este acuerdo dejará huellas imborrables en el seno del PS. Los hay como Benoît Hamon, excandidato a las presidenciales del 2017, que hablan de «una muy buena noticia», pero las voces más centristas consideran que la dirección «ha perdido el norte». François Hollande asegura que sería «un desafío a la propia historia del socialismo, de François Mitterrand y sus compromisos europeos», y, en definitiva, significaría la «desaparición» del PS.

El también socialista Bernard Cazeneuve, antiguo primer ministro, ha anunciado que abandona el partido. En cuanto a Manuel Valls, que ya dio el mismo paso hace tiempo, no ha dudado en denunciar estas negociaciones: «Estamos avasallándonos para evitar el empobrecimiento, vendiendo nuestra alma para salvar las apariencias».

Precisamente Valls es noticia porque durante la celebración de la victoria de Macron estaba junto a las personas más cercanas al presidente. Según Libération, nadie le había invitado, pero el acceso al Campo de Marte era libre y logró situarse en primera fila. Los que se preguntaban sobre su presencia allí ya tienen la respuesta. Valls representará a los franceses de España y Portugal en tanto que candidato de La República en Marcha.