El Tribunal Supremo de Venezuela interviene la Cruz Roja por «maltrato a sus trabajadores»

La Voz P. G. OTERO CARACAS / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

Miguel Gutiérrez | EFE

También ha destituido a su presidente, Mario Villarroel, que llevaba más de 40 años en el cargo, y que será sustituido por el expresidente de la patronal Fedecámaras, Ricardo Cussano

05 ago 2023 . Actualizado a las 17:35 h.

El Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela, en otra decisión controvertida, ha decidido la intervención de la Cruz Roja Venezolana, la remoción de su presidente, Mario Villarroel (quien llevaba más de 40 años en el cargo) y su sustitución por el expresidente de la patronal Fedecámaras, Ricardo Cussano.

La medida fue solicitada por la Fiscalía General de la República, y se produce después de diversas denuncias del número dos del chavismo, Diosdado Cabello, contra Villarroel (quien no se encontraba en Venezuela para el momento de la intervención) en su programa de televisión.

Según Cabello, la Cruz Roja Venezolana aplicaba (y así fue expuesto por la Fiscalía en su solicitud de intervención al TSJ) una «política de acoso y maltrato» hacia sus más de mil trabajadores en el país.

En la última década, sobre Villarroel se ventilaron en la prensa diversas acusaciones por supuesta corrupción, sin que estas produjeran reacción en el chavismo.

El cambio en la actitud del movimiento en el poder desde 1999 en Venezuela obedece, según señalaron analistas en medios locales, a que la Cruz Roja podría manejar hasta un tercio de los tres mil millones de dólares en recursos del país pendientes de liberación en la banca internacional para la atención de la emergencia humanitaria compleja que ha vivido Venezuela en los últimos siete años.

Durante este lapso, la Cruz Roja Venezolana ha jugado un rol importante en la atención de la emergencia, en cooperación con la Cruz Roja Internacional.

Por lo pronto, la intervención levanta alarmas en el sector de las oenegés venezolanas, que ya están amenazadas por la inminente aprobación de una ley que de hecho las interviene; y, en año preelectoral, obliga a recordar que hace apenas tres meses, Daniel Ortega ordenó la disolución de la Cruz Roja en Nicaragua.