El Gobierno británico promete que antes de las elecciones enviará a Ruanda a inmigrantes ilegales

Juan Francisco Alonso LONDRES / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

El nuevo ministro del Interior del Reino Unido, James Cleverly, en un discurso ante la Asociación de Policía y Comisarios del Crimen y el Consejo de Jefes de Policía Nacional.
El nuevo ministro del Interior del Reino Unido, James Cleverly, en un discurso ante la Asociación de Policía y Comisarios del Crimen y el Consejo de Jefes de Policía Nacional. DPA vía Europa Press | EUROPAPRESS

El nuevo titular de Interior, James Cleverly, remarcó que en el Ejecutivo están «absolutamente decididos a que suceda»

16 nov 2023 . Actualizado a las 21:45 h.

Pese a los varapalos judiciales, el Gobierno de Rishi Sunak está «absolutamente decidido» a poner en práctica su controvertido plan de deportar a Ruanda a los solicitantes de asilo que entren ilegalmente en el país. Así lo aseguró el nuevo ministro de Interior, James Cleverly, quien informó que su objetivo es enviar a los primeros simpapeles antes de las próximas elecciones generales.

«Estamos absolutamente decididos a que eso suceda», respondió Cleverly cuando en declaraciones a la emisora Radio Times se le consultó si el primer vuelo con inmigrantes ilegales podría salir hacia el país africano antes de los comicios, que deben celebrarse a finales del 2024.

El Ejecutivo tory indicó el miércoles que está dispuesto a impulsar un «marco legal» de emergencia para conseguir que ese plan salga adelante, después de que el Tribunal Supremo lo declarase ilegal por considerar que Ruanda no es un destino seguro para enviar a migrantes ilegales.

Cleverly defendió la controvertida política, por considerar que ya estaba teniendo «un efecto disuasorio» sobre las bandas que trafican con personas. En lo que va de año unas 28.000 personas han llegado ilegalmente al Reino Unido tras cruzar el canal de La Mancha, una cifra muy inferior a las 45.000 del 2022. Respecto a la posibilidad de que el país se retire de la jurisdicción del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, un tema que el propio premier Rishi Sunak volvió a poner sobre la mesa, el ministro dijo que este debate era solo una «distracción». Cleverly ya ha expresado su oposición a la eventual denuncia por parte de Londres de la Convención Europea de Derechos Humanos.

Una batalla perdida

La decisión del Gobierno británico de insistir en su controvertido plan ha sido cuestionado por expertos, los cuales consideran que las objeciones expuestas por el Supremo no pueden ser subsanadas con un nuevo tratado ni con ninguna otra decisión del Parlamento.

«El tribunal dijo que no confiaba en que Ruanda cumpliera el acuerdo (firmado con el Reino Unido para acoger a inmigrantes ilegales). Esos son los hechos que tienen que cambiar y no veo cómo pueden cambiar sin cambiar la realidad sobre el terreno. Una legislación no cambiará esos hechos», explicó a la prensa el abogado especializado en derechos humanos, Adam Wagner.