Biden resiste, pese a que aumentan las voces que le piden que se eche a un lado

Miguel Palacio NUEVA YORK / E. LA VOZ

INTERNACIONAL

El matrimonio Biden bajan de Air Force One a su llegada al aeropuerto en Westhampton Beach, en Nueva York.
El matrimonio Biden bajan de Air Force One a su llegada al aeropuerto en Westhampton Beach, en Nueva York. Elizabeth Frantz | REUTERS

«The New York Times» le pide en un duro editorial que renuncie a ser candidato, pero los expresidentes Obama y Clinton sale a su rescate

30 jun 2024 . Actualizado a las 16:57 h.

Joe Biden se niega a tirar la toalla, a pesar de las voces dentro y fuera de su partido que le piden que se eche a un lado tras la pésima imagen que dio en su primer debate con Donald Trump. Parte del progresismo de Estados Unidos se ha lanzado a pedir su renuncia. Es el caso del periódico The New York Times que en un editorial titulado «Para servir a su país, el presidente Biden debe abandonar la carrera» asegura que «el mayor servicio público que el señor Biden puede prestar ahora es anunciar que no seguirá presentándose a la reelección». Este diario afín a los demócratas afirma que la candidatura del presidente de 81 años es «una apuesta imprudente» en unas elecciones en las que lo que esta en juego es «el futuro de la democracia estadounidense». 

Biden no se plantea abandonar como dejó claro en un multitudinario mitin el viernes en la ciudad de Raleigh (Carolina del Norte). Aunque admitió que «no debate tan bien como solía», defendió su capacidad para gobernar. «Sé que no soy un hombre joven, es evidente», dijo, y añadió con voz enérgica pero «sé cómo hacer este trabajo». En su decisión de no abandonar pesa la opinión de su esposa, Jill Biden, que según decía un donante al Financial Times, podría ser la que decida en último término si su marido se mantiene en la competición. «Ella es la voz de la razón, y no me puedo imaginar que quiera sufrir cuatro meses de esto… Joe la escuchará», afirmó.

 El inquilino de la Casa Blanca cuenta con el apoyo de los dos presidentes demócratas que le precedieron, Bill Clinton y Barack Obama, bajo el argumento de que sigue siendo el mejor candidato para vencer a Trump.

«A veces hay noches malas de debate. Confiad en mí, lo sé, pero estas elecciones siguen siendo una elección entre alguien que ha luchado por la gente corriente durante toda su vida y alguien que solo se preocupa de sí mismo», colgó Obama en las redes sociales. Para Clinton, «los hechos y la historia importan», y Biden «ha dado tres años de liderazgo sólido» para desenmarañar el pésimo legado de Trump.

También se mostró a favor de que Biden mantenga su candidatura la vicepresidenta Kamala Harris. La segunda de Biden trabaja duro para disipar las dudas sobre su jefe entre los demócratas. Para Harris, es injusto juzgar al presidente en base a «una noche de junio». Trump, por su parte, quiso hacer mofa de su rival durante un mitin en Virginia. El magnate afirmó ante sus fieles que «el corrupto Joe Biden» que en su retiro de una semana en Camp David «estudio tan duramente que no sabía que demonios hacía».