Kemi Badenoch conforma un equipo leal a los exdirigentes «tories» Johnson y Truss
INTERNACIONAL
El Gobierno laborista acusa a sus rivales de no haber aprendido nada de los errores cometidos a lo largo de 14 años en el poder
05 nov 2024 . Actualizado a las 21:32 h.La nueva cúpula del Partido Conservador tiene poco de eso: de nueva. La flamante líder, Kemi Badenoch, ha construido su «gabinete en la sombra» con figuras relevantes en los gobiernos de los polémicos exdirigentes Boris Johnson y Liz Truss. Una decisión que ha sido duramente criticada desde el gobernante Partido Laborista.
Badenoch ha designado a su exrival en las primarias, Priti Patel, como su responsable de asuntos exteriores. Patel fue ministra del Interior durante la gestión de Johnson y es considerada la madre del abortado plan para enviar a Ruanda a los simpapeles.
Asimismo, la líder tory ha nombrado a su más cercano contrincante, Robert Jenrick, como portavoz de justicia. Jenrick era figura ascendente en la breve y tumultuosa gestión de Liz Truss. Por otro lado, de la era de Rishi Sunak rescató al ex ministro del Trabajo Mel Stride, visto como un moderado y a quien colocó como responsable de asuntos económicos.
Tras asegurar que buscó aprovechar «el talento de todo el partido», Badenoch dijo que formó su equipo a partir de «la amplia experiencia» de los designados. Sin embargo, desde el Partido Laborista consideran que la nueva líder tory «no ha aprendido nada». «¿Cómo puede afirmar que está cambiando el Partido Conservador cuando la mayoría de su equipo fueron ministros de Liz Truss, y ella hundió la economía? ¿O afirmar que quiere mantener la integridad cuando la mayoría se ausentó para no votar contra Boris Johnson y sus payasadas?», denunció la presidenta de la formación gobernante, Ellie Reeves.
Los laboristas apoyaron sus acusaciones en estadísticas. Aseguraron que tres cuartas partes de los miembros del nuevo «gabinete en la sombra» conservador se abstuvieron en la votación de la Cámara de los Comunes donde se condenó a Johnson por mentir sobre el Partygate, que el 42 % de ellos (11 de 26) respaldaron a Truss como líder y que casi tres cuartas partes sirvieron en su breve Gobierno.