Biden defiende un legado que deja un Estados Unidos fuerte y con más aliados
INTERNACIONAL
En su último discurso sobre política exterior, carga contra el aislacionismo de Trump y le exige una paz justa en Ucrania
13 ene 2025 . Actualizado a las 23:23 h.A una semana de entregarle a Donald Trump la Casa Blanca, Joe Biden dedicó uno de sus últimos discursos públicos a defender su legado en política exterior, en una presidencia marcada por la invasión rusa de Ucrania y la guerra en Oriente Medio, bajo el argumento de que durante su mandato Estados Unidos se ha convertido en un país «más capaz, mejor preparado y con más aliados que nunca en su historia».
Buena parte del discurso, en el salón del Departamento de Estado y acompañado de Antony Blinken, lo dedicó a poner de manifiesto su labor en recuperar el enfoque diplomático frente al aislacionismo de Donald Trump y devolver al país a una posición de liderazgo. Así, Biden enfatizó la reconexión con los aliados y el fortalecimiento de la OTAN frente a la agresión rusa y el ascenso de China en Asia y el Pacífico. «En comparación con hace cuatro años, Estados Unidos es más fuerte, nuestras alianzas son más sólidas, y nuestros adversarios y rivales más débiles».
En relación con Oriente Medio, Biden subrayó el apoyo que su Administración ha brindado a Israel. Una intervención que, según dijo, provocó la mayor reducción de las capacidades bélicas de Irán de las últimas décadas. No mencionó, en cambio, las críticas a su férreo apoyo a Israel en la ofensiva sobre Gaza dentro de su partido, especialmente entre los sectores más progresistas. Así ayer se atribuyó lo que parece una inminente tregua en Gaza: «Estamos a punto de que una propuesta que expuse en detalle hace meses finalmente llegue a buen término».
La guerra de Ucrania ocupó un lugar central en su discurso. Tras elevar la ayuda militar en los últimos días, Biden aseguró que su Administración ha «sentado las bases» para que su sucesor «pueda proteger el futuro brillante» de un país independiente, por ello le pidió que logre «una paz justa y duradera». Su deseo dependerá de que Donald Trump proteja a Kiev frente a Rusia. Una posibilidad remota, dada la cantidad de opositores a mantener las ayudas a Volodímir Zelenski que el republicano ha incluido en su gabinete.
Biden ha sido testigo del retorno de la guerra a suelo europeo y de un nuevo estallido bélico en Oriente Medio. Dos sucesos que, si bien no son atribuibles a él, han sucedido bajo su mando. Así, tuvo que conformarse con afirmar que es el primer presidente en décadas cuya herencia no incluye la presencia de soldados en Afganistán. Nada dijo de la desastrosa retirada.
En el apartado de los éxitos, Biden también quiso destacar su empeño en devolver a EE.UU. al cauce de la lucha contra el cambio climático con la vuelta a los Acuerdos de París en «el primer día» en el despacho oval.
Más allá de los logros en política exterior, Biden enfrenta un fracaso. El demócrata se presentó a las elecciones del 2020 con un único objetivo: impedir que Trump se mantuviese en la Casa Blanca. Ahora, cuatro años más tarde, Estados Unidos se enfrenta al entorno internacional más inestable de la historia reciente.
Discurso a la nación
Su discurso de este lunes es el primero de esta semana destinado a presentar los logros de una presidencia que se acerca a su fin. El miércoles por la noche, Biden dará un último televisado a la nación en horario de máxima audiencia, como lo han hecho muchos presidentes.
Las audiencias de confirmación ponen a prueba el control de Trump del Senado
M. P.
A partir de este martes, las audiencias para ratificar a los elegidos por Donald Trump para formar su gabinete pondrán a prueba el control del presidente electo sobre la mayoría republicana en el Senado.
Uno de los primeros en enfrentarse al escrutinio es uno de los más controvertidos: Pete Hegseth. Este comentarista de la cadena Fox elegido para ser secretario de Defensa afronta un escándalo por un caso de agresión sexual y por su supuesto abuso del alcohol. Otro discutido nominado es Robert F. Kennedy Jr., el antivacunas llamado a ser secretario de Salud. El miércoles será el turno de Pam Bondi, propuesta como fiscal general de EE.UU., tras la retirada de Matt Gaetz por acusaciones de consumo de drogas y relaciones con menores.
Marco Rubio, elegido para hacerse cargo del Departamento de Estado, llegará a las vistas de confirmación sin prácticamente ninguna oposición entre los senadores republicanos y, por tanto, con todas las posibilidades de recibir el beneplácito sin mayores obstáculos.
Tanto Hegseth como el resto de nominados solo pueden permitirse la deserción de tres senadores del partido si quieren ser confirmados. Una situación que pondrá a prueba la capacidad de Trump de comandar la mayoría republicana y de hacer valer su fuerza política, y que servirá de adelanto de lo que será el resto de su mandato.