Muere una familia española en un accidente de helicóptero en el río Hudson de Nueva York
INTERNACIONAL
Los fallecidos son Agustín Escobar, su mujer Mercè Camprubí, ambos directivos de Siemens España, y sus tres hijos, de menos de 11 años. En el accidente murió también el piloto de la aeronave, de 21 años. Todo indica que se le rompió el rotor trasero a la aeronave
11 abr 2025 . Actualizado a las 12:13 h.Seis personas han muerto al estrellarse un helicóptero en el río Hudson cerca del muelle 40 de Nueva York, Estados Unidos. Los fallecidos son el piloto de la aeronave y cinco miembros de una misma familia de turistas españoles que se encontraba de vacaciones en la ciudad, tal como ha confirmado el alcalde, Eric Adams, en declaraciones a la prensa. Citando fuentes policiales, medios locales informan de que los fallecidos son Agustín Escobar, directivo de Siemens en España, su mujer Mercè Camprubí, directiva en Siemens Energy, y sus tres hijos, de entre 7 y 11 años. El piloto del helicóptero, también fallecido, tenía 21 años. La empresa turística New York Helicopters Tours tenía publicadas ayer por la tarde unas fotografías de la familia momentos antes de subirse en la aeronave de color blanco donde iban a encontrar la muerte. Aparecen sonrientes posando ante las cámaras de la propia empresa turística, en lo que parece una práctica habitual de esta empresa.
Agustín Escobar, natural de Puertollano (Ciudad Real) fue nombrado responsable de la división de movilidad ferroviaria en Siemens el pasado diciembre, después de haber ocupado el puesto de CEO de Siemens España durante dos años. Su esposa, Mercè Camprubí Montal, ocupaba la dirección de Comercialización Global en Siemens Energy y pertenece a una conocida familia de Barcelona. Su hermano Joan fue candidato en 2024 a presidir el FC Barcelona y tanto su abuelo, Agustí Montal i Costa, como su bisabuelo, Agustí Montal Galobart, fueron presidentes de este club de fútbol.

Se investiga por qué el helicóptero se precipitó sobre las aguas del río Hudson a las 15.00 horas de este jueves, cuando llevaba unos 15 minutos y 6 kilómetros de vuelo. Según las primeras pesquisas a la aeronave, un modelo Bell 26 relativamente habitual en ese tipo de viajes, se le rompió el rotor trasero. Realizaban una visita aérea sobre Nueva York en un día gris, con temperaturas muy bajas (en torno a 5 grados centígrados) y desapacible con nubes, lluvia y rachas de viento, aunque no parecía que la niebla pudiera ser un factor determinante. Diversas fuentes sostenían que era el sexto viaje que realizaba durante la jornada para mostrar a distintos grupos de turistas imágenes aéreas de la Gran Manzana.
Poco antes de precipitarse al vacío, el aparato rodeó la Estatua de la Libertad antes de remontar el río Hudson hacia el puente George Washington, según la cadena CNN. Fue al volar sobre Manhattan cerca de las 15:10 (hora local) cuando ocurrió el desastre, en una parte del río cerca de la cosa de Nueva Jersey (la ciudad vecina de Nueva York). Poco más de cinco minutos después los servicios de emergencias empezaban a recibir las primeras llamadas de testigos, alertando de que había habido un accidente y un helicóptero había caída al agua.
Dani Horbiack, que vive en una zona cercana, aseguró que pudo ver desde su apartamento cómo la aeronave «caía del cielo». «Escuché cinco o seis ruidos fuertes que sonaban casi como disparos en el cielo y vi pedazos caer. Luego lo vi meterse en el río», contó la mujer a la prensa. El responsable de la empresa turística que realizar estos vuelos, Michael Roth, reconocía ante los medios que «no he visto nada así en los 30 años que llevo en el negocio de los helicópteros».
«Sonó como una explosión» Otro ciudadano presenció también cómo el helicóptero perdía parte de un rotor y, según él, «se partía en dos», aunque las imágenes de parte de lo ocurrido no dejan claro este último extremo: «Sonó como una explosión sónica», manifestó. Un tercer testigo dijo ver que el aparato se estrelló en «un ángulo de 45 grados» sobre el agua.
Varias patrulleras guardacostas y lanchas de rescate se desplegaron por la zona, cercana a un pantalán, en la orilla de New Jersey. La aeronave, que según se podía apreciar en las imágenes captadas del siniestro -desde cámaras de edificios cercanos- habría perdido parte de sus aspas, quedó flotando semisumergida sobre el costado derecho. Dos de los turistas pudieron ser evacuados a un hospital cercano, pero poco después fallecieron por la extrema gravedad de sus heridas, mientras que los otros cuatro ocupantes perdieron la vida prácticamente en el acto durante el impacto con el agua, según señaló la comisionada del Departamento de Policía de Nueva York, Jessica Tisch.
La empresa del helicóptero turístico lleva 30 años operando
El director ejecutivo de la empresa turística New York Helicopter Tours que operaba el aparato, Michael Roth, dijo a ese medio estar «devastado» y agregó: «No he visto nada así en los 30 años que llevo en el negocio de los helicópteros». Según recoge el diario New York Post, otra aeronave de esta empresa realizó un aterrizaje de emergencia en el años 2013 cuando transportaba a cuatro turistas suecos. A diferencia del accidente sucedido este jueves, en aquella ocasión todos los pasajeros sobrevivieron. En aquel entonces, el director ejecutivo de la empresa turística que ofrece vistas panorámicas de Nueva York, Michael Roth, declaró al Wall Street Journal que el helicóptero se sometía a inspecciones rutinarias diarias, pero que no tenía «ni idea de por qué» la aeronave se había averiado durante el vuelo.
Al menos 32 personas han muerto en accidentes de helicóptero en Nueva York desde 1977, según datos de la prensa local. Se trata, por el número de víctimas, del peor accidente de este tipo desde 2018, cuando murieron cinco de los seis ocupantes de un helicóptero que había despegado de Nueva Jersey y cayó a las aguas heladas del East River, el otro río que baña Manhattan. El más reciente se produjo en 2019, cuando un aparato de este tipo usado para desplazamientos de ejecutivos chocó con el tejado de un rascacielos de Manhattan dentro de un espacio aéreo restringido, muriendo el piloto. Un año antes, en 2018, cinco personas fallecieron en otro siniestro de un helicóptero turístico en el cercano East River, en el lado opuesto de Manhattan.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se ha hecho eco de la tragedia y ha mostrado sus condolencias por los fallecidos en el siniestro. «Las noticias que hoy nos llegan del accidente de helicóptero en el río Hudson son devastadoras», ha escrito el jefe del Ejecutivo en un mensaje en la red social X.
El presidente de la Generalitat expresó este jueves su «consternación» por el accidente y trasladó su «afecto y solidaridad» a los familiares de las víctimas. Salvador Illa aseguró que el Govern se mantiene «en estrecho contacto con el Gobierno de España y con las autoridades estadounidenses» para «agilizar en la medida de lo posible la repatriación de los cuerpos» y «facilitar todo lo que sea necesario» a los allegados. «Insisto, consternación y reflexión de que la vida no está en nuestras manos, y que golpea de la forma más inesperada y más dura cuando menos te lo esperas», afirmó Illa.
El inquilino de la Casa Blanca, Donald Trump, también ha lamentado el «terrible accidente». «Las imágenes del accidente son horribles. Dios bendiga a las familias y amigos de las víctimas», ha señalado en Truth Social, donde ha indicado que «en breve se anunciará qué ocurrió exactamente y cómo».