Canadá escoge al liberal Carney para hacer frente al desafío de Estados Unidos

INTERNACIONAL

El país acepta su discurso contra el magnate y le permite rozar la mayoría
29 abr 2025 . Actualizado a las 22:29 h.Ni una caída estrepitosa ni una victoria holgada. Mark Carney, primer ministro de Canadá y candidato del Partido Liberal, ganó las elecciones del país norteamericano, aunque sin atar una mayoría absoluta en el Parlamento. Los liberales cosecharon 168 escaños —ocho más que en las anteriores elecciones— y un 43,5 % de los votos, por encima del 20,3 que estimaban los sondeos en diciembre. Las últimas encuestas calcan su resultado final, pero el crecimiento final de los conservadores minimiza su triunfo. La firma Nanos Research estimó hace una semana un 36,3 % para el líder de la oposición que, a la hora de la verdad, ha sido un 41,4.
El presidente de Estados Unidos y su forma de hacerle frente ha estado muy presente en el debate político en Canadá. Incluso en la víspera, con una publicación de Donald Trump en la que replica sus ambiciones expansionistas y se presenta como un candidato electoral más. «Elijan al hombre con la fuerza y ??la sabiduría para reducir sus impuestos a la mitad, aumentar su poder militar, gratis, al máximo nivel mundial, y cuadruplicar su tamaño de automóviles, acero, aluminio, madera, energía y todos los demás negocios, sin aranceles ni impuestos, si Canadá se convierte en el querido estado número 51 de los Estados Unidos de América».
La suerte de Carney, reputado economista bancario y que se estrenará como diputado tras sustituir a Justin Trudeau como primer ministro, está irónicamente ligada al ascenso de Trump. Él produjo el punto de inflexión en la campaña. En Ottawa, celebró su triunfo con un nuevo alegato a la resistencia: «EE.UU. quiere nuestra tierra, [...] nuestro país, y no son amenazas gratuitas. Trump quiere quebrarnos para poseernos. Y eso no pasará, nunca jamás pasará». Sin anticipar un posible inicio de conversaciones con el presidente estadounidense, sí que advirtió que, en todo caso, se producirían «en nuestros términos».
La remontada liberal contrasta con la derrota de los conservadores, que lograron 144 escaños. El electorado —25 millones de canadienses estaban llamados a las urnas— penalizaron el ideario de su candidato, Pierre Polievre, similar al de Trump, pese a que cierra filas contra el afán expansionista del presidente de Estados Unidos. De hecho, el propio Polievre se quedará fuera del Parlamento, al perder su asiento por la circunscripción del distrito de Carlenton, en Ontario. Pese a la derrota, el partido registra su mejor resultado desde 1988, por lo que el jefe de los conservadores rechaza por ahora dimitir.
Sí que renuncia el líder de izquierdas del Nuevo Partido Democrático, Jagmeet Singh. Su formación pasó de 24 a siete asientos en el Legislativo. Entre sus pérdidas está el escaño de Singh. El batacazo no es tan pronunciado como para que no sean determinantes. El Partido Liberal tiene como opción llegar a un acuerdo con el NPD con el que podría alcanzar los cuatro parlamentarios que le separan de la mayoría.
El triunfo de Carney se cimienta en parte en su buen resultado en Quebec. Los soberanistas del Bloque Quebequés cedieron diez escaños a la formación gobernante, que consigue así 43 diputados y, por tanto, uno de sus mejores resultados en décadas.