Sánchez se une a la izquierda de América Latina frente a la «internacional del odio»
INTERNACIONAL

Al grupo se sumarán México, Reino Unido, Canadá y Sudáfrica
21 jul 2025 . Actualizado a las 22:13 h.El presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, instó este lunes a los gobiernos progresistas de todo el mundo a unirse y «pasar a la ofensiva» en defensa de la democracia ante la que denomina «internacional reaccionaria del odio y la mentira» y a la que cree que ha sucumbido la derecha tradicional.
Sánchez hizo este llamamiento en su comparecencia en el palacio de la Moneda con motivo de la cumbre en defensa de la democracia en la que participó junto a los presidentes de Chile, Gabriel Boric; Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva; Colombia, Gustavo Petro, y Uruguay, Yamandú Orsi, y en la que avanzó que España organizará en el año 2026 una nueva reunión de este tipo en apoyo de la democracia. La reunión de este lunes, convocada con el epígrafe «Democracia siempre», pretende impulsar una plataforma en defensa de las instituciones democráticas frente a los movimientos populistas y de ultraderecha que las intentan debilitar.
El anfitrión de la cumbre, el presidente Boric, anunció que los mandatarios de México, Honduras, el Reino Unido, Canadá, Sudáfrica, Dinamarca y Australia decidieron unirse a la alianza y confirmó que estarán presentes en la próxima reunión del grupo, que se celebrará en septiembre en Nueva York, en paralelo al 80.º período de sesiones de la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU).
«Acá está naciendo algo grande. En momentos en que la democracia está bajo ataque en diferentes partes y desde diferentes sectores políticos, tenemos un grupo importante de líderes de países distintos pero con visiones que se complementan para defender la democracia», dijo el mandatario chileno, tras liderar el encuentro, según recoge Efe.
«Esto no es solamente un acto simbólico, sino que es un acto político que además tiene propuestas concretas tanto en materia de desinformación como en la lucha contra la desigualdad», añadió en una declaración desde La Moneda junto a Orsi, Sánchez, Lula y Petro.
«No basta con apuntar a quien piensa distinto y decir que esta persona o esta idea es una amenaza. Tenemos que ser capaces de proponer una alternativa. La democracia tiene que cumplir, tiene que entregar resultados, mejorar las condiciones de vida de nuestros pueblos», agregó Boric, que dejará La Moneda el próximo marzo.
Necesidad de colaboración
En esta línea, el jefe del Ejecutivo español destacó la necesidad de colaboración de todos los gobiernos progresistas y consideró que «es hora de dar un paso al frente» para defender y profundizar activamente la democracia ante lo que considera «una amenaza real, la internacional del odio y la mentira». Para Sánchez, interpela a todos el desafío de hacer frente a la amenaza «liderada por una coalición de intereses entre oligarcas y la ultraderecha».
«Una internacional del odio y la mentira que avanza peligrosamente, por desgracia, en ambos continentes, poniendo en riesgo los derechos y libertades por los que las generaciones que nos precedieron lucharon tanto, a veces sacrificando la propia vida», subrayó.
El presidente brasileño, por su parte, admitió que «el sistema político y los partidos cayeron en descrédito», lo que ha fortalecido a la ultraderecha global. «En este momento en que el extremismo intenta reeditar prácticas intervencionistas, precisamos actuar juntos», remarcó Lula.
Su homólogo uruguayo, Yamandú Orsi, llamó a «aterrizar la propuesta de democracia a cuestiones que los pueblos sientan». «En la convicción de poner a la democracia por delante y como centro de la futura discusión, muchos más países se van a unir si el objetivo es fortalecer esta forma de convivencia que viene de tan lejos y tantas vidas y sacrificios nos ha costado», afirmó. El colombiano Gustavo Petro llamó a «encender la luz cuando las tinieblas llegan». «El progresismo mundial debe juntarse en todo el mundo», enfatizó.
El germen de esta alianza se remonta al año pasado, cuando Lula y Sánchez organizaron, en el marco de la 79.ª Asamblea General de la ONU, un encuentro contra los extremismos, al que también acudió Boric.
El escenario se ha vuelto más complejo desde entonces, con la ultraderecha y los autoritarismos haciéndose fuertes en muchos países y con una guerra comercial global declarada por el presidente de EE.UU., Donald Trump. La cumbre, de hecho, se celebra a menos de dos semanas de que entren en vigor el 1 de agosto los nuevos aranceles anunciados por Trump.