¿Qué es una infección polimicrobiana como la del papa Francisco? «Es común en gente mayor, complicaciones por las que tenemos los hospitales llenos»

Lucía Cancela / Lois Balado LA VOZ DE LA SALUD

ENFERMEDADES

El papa Francisco el 12 de febrero del 2025.
El papa Francisco el 12 de febrero del 2025. DPA vía Europa Press | EUROPAPRESS

El pontífice ingresó en el hospital Gemelli, de Roma, el pasado viernes a causa de una bronquitis | Un neumólogo explica su situación

17 feb 2025 . Actualizado a las 16:57 h.

El papa Francisco continúa ingresado en el hospital Gemelli, de Roma, donde lleva desde el pasado viernes, cuando acudió por una infección respiratoria. Pese a su mejoría, permanecerá ingresado «el tiempo que requiera su tratamiento». Las pruebas realizadas en los últimos días «han demostrado una infección polimicrobiana del tracto respiratorio que ha obligado a modificar aún más la terapia». 

A la espera de un nuevo parte médico, en el comunicado del Vaticano emitido el domingo por la tarde se afirmaba que «las condiciones clínicas son estables y que continúa el proceso terapéutico prescrito por el personal médico». 

Francisco, de 88 años, padece una bronquitis que la semana pasada le había dificultado desarrollar su agenda con normalidad. De ahí, la decisión de proceder con el ingreso. La bronquitis es la inflamación de los conductos bronquiales, las vías respiratorias que llevan el oxígeno a los pulmones. Entre sus síntomas, se encuentra tos con mucosidad, dificultad para respirar, jadeo, fiebre baja y presión en el pecho. 

En su forma aguda está causada por una infección, que se suele presentar después de una gripe o resfriado. «El principal síntoma de bronquitis aguda es la tos persistente, que puede durar entre 10 y 20 días. La tos puede producir mucosidad incolora (una sustancia pegajosa). Si la mucosidad es amarillenta o verdosa, es posible que usted tenga además una infección bacteriana», indica la Sociedad Española de Medicina Interna (SEMI), que señala que, incluso después de haber remitido la infección, la tos seca puede extenderse en el tiempo. Cuando la inflamación adquiere mayor gravedad, puede llegar provocar sensación de falta de aliento. 

Por lo general, las bronquitis no suelen conllevar la prescripción de medicamentos porque suelen estar provocadas por un virus. Solo cuando el médico considera que es una bacteria la que puede estar detrás, se procede a este tratamiento. 

¿Qué es una infección polimicrobiana?

Ahora bien, ¿qué es una infección polimicrobiana? Se trata de una infección en la que conviven varios tipos de microorganismos —bacterias, virus u hongos—. Cuando se produce en el tracto respiratorio, la infección afecta a pulmones, a los bronquios o la tráquea, lo que dificulta la respiración e incrementa el riesgo de complicaciones. 

El doctor Pedro J. Marcos, neumólogo del Complexo Hospitalario Universitario de A Coruña (Chuac), reconoce que este tipo de procesos infecciosos son habituales, «las típicas complicaciones en gente mayor, por las que tenemos los hospitales llenos. El especialista explica que «una persona de edad media es capaz de manejarlo más o menos bien, con un poco de tos. Pero, en individuos mayores, puede hacer que se descompensen si ya padecen alguna patología cardíaca o respiratoria, y que incluso, tengan que ingresar», señala. Un problema que es más habitual en invierno por la mayor circulación de patógenos, entre ellos, la gripe, el virus respiratorio sincitial, el coronavirus o los rinovirus. 

Al contrario de lo que puede suceder cuando el problema tiene su origen en un único microorganismo, en una infección polimicrobiana, el tratamiento ha de abordar cada uno de los patógenos involucrados, por eso suele ser más complejo. 

El camino a la infección suele ser habitual en muchos pacientes. El proceso comienza con un virus: «Tienen la capacidad de dañar el epitelio respiratorio y reducen la capacidad de nuestras defensas, como los macrófagos y los polimorfonucleares», señala el neumólogo. En esta situación, las bacterias se encuentran con una menor barrera defensiva y son capaces de conquistar a su huésped. «Es ahí donde viene lo polimicrobiano, una coinfección bacteriana tras un cuadro viral», añade el experto. Los nombres más comunes son el neumococo, el estreptococo o el estafilococo. En algunos casos, se encuentra también la presencia de hongos. 

Así, suele requerir una combinación de antibióticos, antivirales, antifúngicos u otros medicamentos específicos, todos ellos en función de los patógenos identificados. En estos casos, la hospitalización es necesaria porque el paciente debe estar monitorizado y la administración de los fármacos es intravenosa. «Se suelen abordar con antibióticos, además de oxígeno, o si aparecen broncoespamos, con tratamientos adecuados», precisa el neumólogo. 

El pronóstico de cada persona depende de su contexto. En el del papa Francisco, se suman la edad y el hecho de que el año pasado padeciera una neumonía, «lo cual es un factor predisponente». A ello podrían añadirse patologías crónicas o que la persona haya enlazado un ingreso tras otro. Con todo, el médico especialista explica que este tipo de infecciones no suelen tener un mal final: «puede ser una hospitalización más o menos larga pero no suele terminar con el exitus del paciente».