Eugenia Silva desvela que le pusieron una prótesis de titanio en la cadera porque padece artrosis: «No es fácil asumir algo así»
ENFERMEDADES
La modelo ha compartido la noticia en sus redes sociales, donde cuenta que todavía se está recuperando
12 oct 2025 . Actualizado a las 15:40 h.Eugenia Silva ha sorprendido a sus seguidores con su última publicación. La modelo y empresaria española pasó por una operación debido a una artrosis severa que tiene en la cadera. «Os he echado de menos. Ese cariño que me regaláis cada día es algo muy especial, y estos días de silencio también me han hecho sentirlo», comienza escribiendo la madrileña, que suele ser muy activas en sus redes sociales. «Hace unos días me operaron por una lesiones debidas a una artrosis severa en la cadera. Me han puesto una prótesis de titanio. Era necesario. El dolor ya no me permitía seguir con mi ritmo habitual», continúa la modelo, que acompaña el texto con imágenes de ella en el hospital.
Cuenta que este mes de septiembre le resultó «especialmente retador»: «No es fácil asumir algo así, sobre todo cuando tu carrera está tan ligada a la imagen, al movimiento, al cuerpo en acción… O porque muchas veces asociamos este tipo de intervenciones a etapas más avanzadas de la vida». Sin embargo, destaca que, en la actualidad, se está cuidando y recuperándose: «Estoy escuchándome. Y entendiendo que estar bien también es esto: parar», dice en referencia al elevado ritmo de vida que tiene debido a su profesión.
Silva finaliza su publicación dando las gracias al equipo médico que la operó: «Os iré contando, desde casa, cómo va evolucionando esta nueva etapa». Los comentarios dándole ánimos y deseos de una buena recuperación no tardaron en llegar.
¿Qué es la artrosis?
La artrosis se considera la enfermedad articular más frecuente, y la causa reside en un desgaste del cartílago articular. Los sitios que, con mayor asiduidad, se ven afectados son la columna, la cadera, la rodilla y algunas articulaciones del comienzo del dedo gordo del pie.
Se manifiesta con dolor, rigidez e incapacidad funcional cuando el cartílago ya está lesionado. Pese a que se parece a la artritis tanto en su nombre como en sus síntomas, la Fundación Española de Reumatología destaca que es importante diferenciarlas: «En la artritis, la inflamación es la causante de la enfermedad, y en la artrosis es el desgaste. Además, en esta última, el dolor es de tipo mecánico, es decir, que empeora con los movimientos y mejora con el reposo», precisan.
De igual forma, la persona puede tener chasquidos o crujidos articulares, debido a la fricción entre los tejidos que están deteriorados de la articulación o a microtraumatismos, así como, en las últimas etapas, deformidad de la zona.
La artrosis no es hereditaria, aunque cuenta con un componente de riesgo genético. Además, hay factores de riesgo que incrementan las probabilidades de padecerla. Es el caso de la obesidad, la inestabilidad articular por falta de masa muscular, las alteraciones en la postura o las sobrecargas repetitivas, ya sean laborales o deportivas. Además, la edad y el sexo son motivos de peso. Más del 70 % de los mayores de 50 años tienen artrosis radiológica y las mujeres se ven más afectadas por esta patología. Durante la menopausia, la pérdida de estrógenos incrementa su predisposición. Se calcula que, en España, la artrosis afecta al 29 % de la población con más de cuarenta años, según el estudio Episer 2016.
En la actualidad, no tiene cura, por lo que el objetivo de la artrosis es mejorar el dolor, retrasar la evolución de la enfermedad y mejorar la calidad de vida. Con todo, existen fármacos que permiten controlar el dolor, mantener la funcionalidad de la articulación y reducir la progresión de la artrosis.