Javier Escalada, endocrinólogo: «Estamos viendo más casos de osteoporosis en personas menores de 50 años»
ENFERMEDADES
El experto advierte que una menopausia temprana, sumada a otros factores como el sedentarismo o el consumo de tabaco o alcohol, incrementa el riesgo de perder densidad ósea
09 dic 2025 . Actualizado a las 11:37 h.La osteoporosis, caracterizada por la disminución de la densidad ósea, incrementa el riesgo de sufrir fracturas ante impactos o traumatismos cotidianos, como caídas incluso desde la propia altura. Tradicionalmente, este cuadro se ha asociado de manera principal a mujeres posmenopáusicas, dado que los estrógenos protegen al hueso y, con la pérdida de estas hormonas, la densidad del tejido óseo comienza a disminuir de manera rápida. Pero recientemente, algunos expertos han observado un aumento en el diagnóstico de esta enfermedad en mujeres más jóvenes, en torno a los 40 años. El doctor Javier Escalada, director del Departamento de Endocrinología y Nutrición de la Clínica Universidad de Navarra, alerta acerca de este aumento. El experto explica cómo prevenir la osteoporosis a lo largo de la vida y cuándo conviene acudir al médico para hacerse una densitometría y descartarla.
—¿A qué se atribuyen los casos de osteoporosis en personas premenopáusicas?
—Estamos viendo más casos de osteoporosis porque se están solicitando densitometrías en mujeres al entrar en la menopausia, en edades en las que normalmente no habría que solicitar la prueba. Según las sociedades científicas, esta prueba, que sirve para medir la densidad ósea, se debe realizar cuando haya más probabilidades de encontrar osteoporosis. Esto puede ser, frecuentemente, por encima de los 65 años. En nuestro entorno, se está haciendo cada vez más cuando la menopausia aparece por debajo de los 50 años. Si la aparición de la menopausia ocurre en torno a los 45 años, la persona podría tener osteoporosis. También podemos encontrar casos de osteoporosis en premenopausia, pero ese no es le porcentaje más alto de mujeres jóvenes que la padecen.
—¿Por qué una menopausia más temprana aumenta el riesgo de osteoporosis?
—En sí, la menopausia es uno de los principales factores que causan una pérdida de masa ósea al desaparecer los estrógenos, que son unas hormonas que protegen el hueso. La aparición de la menopausia, unida a otras situaciones, como el estilo de vida sedentario o el uso de tratamientos que se utilizan con más frecuencia, como los glucocorticoides, que se prescriben más que antes, las enfermedades crónicas inflamatorias o los trastornos de la alimentación, son factores de riesgo. Todas ellas son situaciones que pueden contribuir a inducir una mala absorción del calcio y la vitamina D, ocasionando que existan más casos de osteoporosis de lo que pensábamos. Por eso, la realización de densitometrías precoces permite la posibilidad de hacer un diagnóstico temprano y al hacer estas pruebas se está encontrando más alteración del hueso de lo que esperábamos, puesto que estamos hablando de mujeres que muchas veces no llegan a los 50 años.
—¿Es posible prevenir la osteoporosis?
—Sí. Prácticamente en todos los casos, a no ser que haya un componente genético que dé lugar a fracturas de repetición, que son situaciones muy concretas, se puede combatir e incluso revertir la osteoporosis. Pero antes de eso, la prevención es posible a través de hábitos saludables: una dieta rica en calcio y vitamina D, ejercicio físico regular, evitar tóxicos como el tabaco o el alcohol, que para el hueso son muy malos. Si hacemos esto desde etapas precoces, desde la juventud, podremos prevenirla. Otro factor en el que siempre incidimos es el consumo de cafeína, que si es excesivo, cuando ya la dosis diaria sobrepasa las cuatro tazas al día ese exceso de cafeína puede dar lugar a una pérdida excesiva de calcio por orina y favorecer la pérdida de hueso. Por tanto, aconsejamos reducir la ingesta de cafeína. Todo esto puede ayudar a evitarlo, pero una vez se haya producido la osteoporosis, hay que poner tratamientos específicos.
—¿Qué tratamientos permiten recuperar densidad de hueso?
—Contamos con fármacos que consiguen disminuir la reabsorción del hueso y con otros que lo que hacen es formar tejido óseo nuevo. Hay diferentes mecanismos para lograrlo. El hueso, aunque parezca que es una cosa inerte, es un órgano vivo y tiene procesos de formación y de reabsorción sobre los que podemos actuar para recuperar hueso perdido. El objetivo de todo esto es disminuir el riesgo de fractura y estos tratamientos han demostrado eficacia en ese aspecto, sobre todo en las localizaciones en las que se lo mide, por ejemplo, a nivel de la cadera.
—¿Cómo se elige el tratamiento para cada caso?
—Se utiliza una familia de fármacos u otra dependiendo de dos factores principales. Uno es cómo de grave sea la pérdida de masa ósea. Si la persona ya ha tenido fracturas por fragilidad, se intenta recurrir a fármacos formadores de hueso, pero estos tratamientos tienen una duración limitada, no se pueden utilizar de manera indefinida. Cuando ha transcurrido ese tiempo, se utiliza la otra familia de fármacos, que son los que disminuyen la reabsorción ósea. Esta es la manera más eficaz para recuperar hueso perdido. Cuando hemos conseguido recuperar hueso, tenemos que utilizar otro fármaco que lo selle, por así decir, y que permita que ese beneficio se mantenga. Por eso, la recomendación más importante es que no se suspenda el tratamiento de golpe.
—¿Qué síntomas nos pueden hacer sospechar de una osteoporosis en edades tempranas?
—En la mayoría de las ocasiones, la osteoporosis pasa desapercibida. Es asintomática, el síntoma ya es la fractura que se produce, en realidad como consecuencia de la enfermedad. No es cualquier fractura, sino una causada por un traumatismo leve, que nos haría sospechar de que ha sido causada por la fragilidad del hueso. Si yo tropiezo, me caigo y me fracturo, esto indica que mis huesos no están bien. En otros casos, un dolor de espalda repentino, que aparece de forma brusca, puede indicar una fractura vertebral. Una pérdida de estatura en un período de tiempo corto también puede hacernos sospechar que se esté produciendo un aplastamiento vertebral. Pero, como la mayor parte de las veces es asintomática, lo importante es hacer una densitometría cuando una persona reúne factores de riesgo.
—¿Qué consejos daría para preservar el hueso a lo largo de la vida?
—Además del estilo de vida activo, solemos acompañar esto de consejos sobre alimentación rica en calcio. Siempre es mejor obtenerlo a través de la dieta que con suplementos farmacológicos. Y la síntesis de vitamina D es importante porque hace que tanto la alimentación enriquecida en calcio como los tratamientos para la osteoporosis sean todavía más eficaces. Estas medidas se complementan entre sí, por lo que podemos incluir el consumo de vitamina D cuando es necesario.