El desayuno de Isabel Preysler, sin café y con agua de Jamaica: ¿tiene sentido?

Lucía Cancela
Lucía Cancela LA VOZ DE LA SALUD

VIDA SALUDABLE

Borja Sánchez-Trillo | EFE

En el documental de Disney+ que protagoniza muestra su estilo de vida saludable: «Primero tomo agua caliente con lima, y después sigo con un zumo de pomelo, un kiwi y otra vez pomelo, pero en fruta»

22 dic 2023 . Actualizado a las 17:44 h.

Este 5 de diciembre, Disney+, la plataforma de vídeo en streaming, estrenaba el documental Isabel Preysler: Mi Navidad, en el que la socialité muestra cómo prepara su casa para la época festiva aunque planee pasar las celebraciones navideñas en Miami, con su familia. 

Más allá de sus quehaceres diarios, de su historia y de anécdotas con sus hijos y nietos, la producción también acompaña a la madre de Tamara Falcó en su rutina de cuidado y estilo de vida. Precisamente, el primer capítulo comienza con Preysler sentándose a desayunar con una propuesta más que llamativa. 

En primer lugar, bebe agua caliente con algo de lima, a la vez que toma unas vitaminas. «Después, sigo con un zumo de pomelo, un kiwi y un pomelo, pero en pieza», indica Preysler, que a continuación toma semillas de lino remojadas en agua y, cuando termina de desayunar, opta «por una infusión de agua de Jamaica». Confiesa que siempre sigue esta estructura, que le gusta hacerlo en silencio y sin nadie que le interrumpa. 

Ahora bien, ¿es este un buen ejemplo de desayuno? «La esencia no está mal, pero hay cosas que mejorar», responde Laura Reviejo (@reviejonutricion), dietista-nutricionista y farmacéutica, con una perspectiva general. El agua caliente tiene sentido ya que activa el complejo migratorio motor. «Este es un patrón de actividad del músculo liso, tanto del estómago como del intestino, que se suele activar cuando hay un ayuno o cuando se consume agua tibia o caliente», detalla la experta. Su función, «dicho de modo sencillo», es la de limpiar el tubo digestivo de restos de alimentos y evitar que haya un sobrecrecimiento bacteriano y se acumulen ahí distintas bacterias «que no deberían estar». 

Tal y como explica Reviejo, es un proceso que funciona de forma fisiológica, «sobre todo, cuando se hacen ayunos prolongados superiores a 4 horas, como el nocturno», indica. Eso sí, con la ingesta de agua tibia o caliente «se puede potenciar». Es más, —y sin ánimo de caer en milagros imposibles— es una medida que esta nutricionista suele recomendar a pacientes con estreñimiento. La lima, por su parte, «aporta un toque de antioxidantes, aunque tampoco es que haga mucho», precisa. 

Mejor, sin zumo

Parte del desayuno de Isabel Preysler.
Parte del desayuno de Isabel Preysler. Disney +

La nutricionista se muestra más crítica con el zumo de pomelo ya que, al igual que sucede con el de naranja o el de cualquier otra fruta, siempre resulta más beneficioso consumir la pieza entera. «Al exprimirlo, se quita la virtud de la fruta. Nos quedamos con el azúcar libre y se pierde la fibra que, además de dar saciedad, evita que haya un pico de glucosa en sangre muy acusado», señala. No solo esto, sino que con el acto de masticar, el cerebro recibe las señales de que la persona está comiendo, «y al final, acabará llenándose antes y más», señala. 

La calidad de los alimentos sólidos es algo que se puede destacar. «Hay fibra soluble, porque está añadiendo varias frutas que son fuente de ello. Este es un componente que, junto a los cítricos como el kiwi, que aportan vitaminas antioxidantes, es muy beneficioso para la microbiota», explica la experta, quien considera que cualquier momento es bueno para consumir fruta. «Soy partidaria de comerla siempre que la persona quiera y, si a lo largo del día, se introducen cítricos está estupendo, porque son una fuente de antioxidantes que ayudan al sistema inmunitario y a la inflamación», detalla. 

Por su parte, la experta también valora positivamente el uso de semillas de lino, «que remojadas mejoran su absorción aunque molidas podría ser mejor», apunta. Este ingrediente es una fuente de ácidos grasos Omega 3, de fibra, de fósforo o magnesio, entre otros. Una joya en pipa. 

Ahora bien, según la experta, el desayuno parece carente de varios macronutrientes. «Le falta una buena fuente de proteínas, que es algo indispensable en esta comida para mantener la saciedad, y algo más de grasa». También se podrían añadir un aporte de hidratos de carbono, aunque no serían estrictamente necesarios salvo si la madre de Enrique Iglesias fuese a entrenar intensamente en las horas posteriores. Reviejo considera que limitarse a comer solo fruta puede hacer que el hambre no tarde en llegar, de ahí, el sentido de buscar el desayuno «más sano, equilibrado y saciante posible».

Huevo, queso de de cabra u oveja y canela: la receta para mejorarlo

Con esto en mente, ¿cómo se podría mejorar? La base de un buen desayuno suele estar en el aporte de proteína, que se vuelve más importante con la edad debido a que la pérdida de masa muscular se acelera. «Se podría añadir un huevo, hacerse con una tortilla francesa o un revuelto. O, de nuevo, fruta con un yogur o queso de cabra u oveja», indica. La grasa, por su parte, se podría aumentar con algo de aguacate o una ración de frutos secos; y, si fuese necesario, los hidratos de carbono vendrían de la mano de un cereal integral, en forma de tostada o copos de avena. 

Así, la nutricionista aporta varios ejemplos: «Un bowl de fruta con un poco de canela, para mantener los picos de glucosa, y unos frutos secos. Y luego, semillas de lino molidas en un lácteo, como un yogur, de cabra u oveja. Otra opción podría ser una tostada de un buen pan integral, con una base de tomate y aguacate, y una proteína de calidad como queso fresco, huevos revueltos o unas lonchas de jamón», expone. 

¿Agua de Jamaica?

Isabel Preysler mientras desayuna.
Isabel Preysler mientras desayuna. Disney +

El agua de Jamaica es un tipo de infusión más. «Vuelve a ser rica en vitamina C y tiene un motón de flavonoides, con lo cual, además de una buena hidratación aporta antioxidantes», indica Reviejo. Ahora bien, no cuenta con evidencia científica que sugiera grandes beneficios. Lo mismo le sucede a otro tipo de infusiones como la manzanilla, la menta poleo o el jengibre. 

Además, Isabel Preysler también cuenta que, cada mañana, toma una serie de vitaminas, aunque no precisa cuáles son. ¿Tiene sentido? Para Reviejo, estos son necesarios cuando existe un déficit que lo justifique. «En el resto de casos, las necesidades se suelen cubrir mediante una alimentación equilibrada», detalla. 

Algo que puede sorprender a muchos es que la reina del papel couché no toma café, aún cuando tiene muchas virtudes, «tantas que yo lo considero un alimento». Esta bebida se hace valer, especialmente, por la cafeína, «un alcaloide cuyo beneficio principal es que activa el sistema nervioso central, con lo cual aumenta la energía, reduce el cansancio y estimula los signos de alerta», indica. Además, cuenta, tiene antioxidantes, polifenoles «y fibra con efecto probiótico y prebiótico», concluye. 

Lucía Cancela
Lucía Cancela
Lucía Cancela

Graduada en Periodismo y CAV. Me especialicé en nuevos formatos en el MPXA. Antes, pasé por Sociedad y después, por la delegación de A Coruña de La Voz de Galicia. Ahora, como redactora en La Voz de la Salud, es momento de contar y seguir aprendiendo sobre ciencia y salud.

Graduada en Periodismo y CAV. Me especialicé en nuevos formatos en el MPXA. Antes, pasé por Sociedad y después, por la delegación de A Coruña de La Voz de Galicia. Ahora, como redactora en La Voz de la Salud, es momento de contar y seguir aprendiendo sobre ciencia y salud.