Por el camino de Chantada a Belesar

C. Rueda | F. Albo MONFORTE

LEMOS

ALBERTO LÓPEZ

La antigua ruta de Os Codos presenta numerosos atractivos paisajísticos e históricos El itinerario discurre en gran parte por la calzada romana que continúa en tierras de O Saviñao

10 mar 2005 . Actualizado a las 06:00 h.

?n tiempos del Imperio Romano, entre los siglos I y IV, se construyó en el sur lucense una vía secundaria ligada a la calzada principal que comunicaba Astorga y Braga. Esta ruta era también una vía de entrada al territorio gallego, que más tarde se convirtió en un camino real, el que hoy se conoce como Camino Sur a Santiago o Camino de Invierno. El tramo comprendido entre Chantada y Belesar -que continúa en la orilla opuesta del Miño, en O Saviñao- presenta hoy un gran interés como ruta de senderismo, ya que atraviesa parajes de gran valor paisajístico e histórico, aunque algunos trechos del camino primitivo han desaparecido debido a la construcción de modernos viales. El punto de inicio de la ruta está en el lugar de O Priorato, a un kilómetro de Chantada. Allí se encuentra la iglesia de San Salvador de Asma, conocida popularmente como O Convento, un notable ejemplar de románico rural, datada en el siglo XII. En el templo se guarda un excelente retablo del siglo XVI. La caminata empieza en un camino que va de O Priorato al lugar de Santo Estevo, situado a solo 400 metros. Allí puede verse una antigua casa con un curioso dintel en el que está grabada el año de su construcción: 1694. Después de cruzar el pueblo, la ruta sigue por una pista que lleva hacia la aldea de Córneas, a 600 metros, en la que hay otra casa centenaria con un llamativo dintel. Un desvío que aparece a la derecha lleva desde aquí a la aldea de O Penso, donde hay que tomar un camino de carro para ir hasta A Cancela. Este lugar está a dos kilómetros del inicio de la ruta. A pocos metros de A Cancela está la iglesia románica de Santa María de Camporramiro, construida originalmente en el siglo XII, a la que se añadió una sacristía en el siglo XVIII. A 300 metros del templo está el pueblo de Vilaboa, donde se halla una llamativa construcción tradicional conocida como Pazo do Cubano. Calzada primitiva Para continuar el recorrido hay que volver a A Cancela y caminar por la carretera que va hacia Chantada. A unos cien metros hay que girar a la derecha y tomar un desvío que conduce al pueblo de San Pedro de Líncora, situado a medio kilómetro. Al llegar a la altura de su iglesia es preciso desviarse de nuevo a la derecha, tomando ahora el camino original de los Codos de Belesar. La ruta pasa después por los lugares de Rubiás y A Devesa, para cruzar la carretera a la altura de Vilanova y salir a Os Queixeiros, al cabo de otro kilómetro de marcha. En este punto hay que caminar unos metros por la carretera hasta llegar a la aldea de A Ponte da Ermida, donde se retoma la calzada primitiva. El camino lleva después al arroyo de Santa Lucía, que es preciso atravesar mediante unos típicos pasales hechos de gruesos bloques de piedra. En la orilla opuesta del cauce se levanta un notable molino construido en piedra de cantería, cuyo estado de conservación es bastante deficiente. Otros cien metros de recorrido y la ruta sale de nuevo al asfalto, por el que hay que caminar unos 600 metros antes de recuperar el camino primitivo, que reaparece a la izquierda del vial. Después de andar otros 300 metros hay que cruzar de nuevo la carretera -ya por última vez- y retomar nuevamente el camino antiguo hasta llegar al pueblo de Belesar. En este último tramo, de unos 300 metros, se puede disfrutar de unas excelentes vistas de la localidad y de las riberas del Miño. Junto al puente que cruza el río en este lugar se encuentra un peto de ánimas, dedicado a San Bartolomé.