La baja ocupación dificulta la reivindicación de las autovías
21 sep 2014 . Actualizado a las 05:00 h.Todas las carreteras del sur de la provincia están muy lejos de las cifras medias de tráfico que respaldarían técnicamente su desdoblamiento en autovía. La media comúnmente aceptada para considerar saturada una carretera es de 10.000 vehículos diarios, pero ningún tramo alcanza siquiera la mitad de esa cantidad. Y no cabe esperar que en unos pocos años la situación cambie de forma significativa, porque en general hoy circulan por las carreteras del sur de Lugo menos coches que hace diez años.
La crisis económica sorprendió a esta zona sin un solo kilómetro de autovía construida. En el 2008 daban sus primeros pasos los procedimientos administrativos para que el Ministerio de Fomento construyese la A-76 (Ponferrada-Ourense por Monforte), y la A-56 (Ourense-Lugo por Chantada). Desde el 2003 se hablaba también de la A-72 (Monforte-Chantada), aunque lo cierto es que cuando llegó la recesión este proyecto parecía ya aparcado. Al mismo tiempo, la Xunta terminaba el corredor Lugo-Sarria y lo hacía con expropiaciones aptas para su futuro desdoblamiento. Cuatro años después del comienzo oficial de la crisis, lo más parecido a una autovía que hay en el sur de Lugo es la explanada de tierra de lo que iba a ser el primer tramo de la A-56, cuya construcción fue paralizada por Fomento en el 2010, a los pocos meses de haber empezado.
Los ayuntamientos, partidos políticos y agentes sociales que presionan para que el Gobierno central y la Xunta retomen esos proyectos no pueden apoyarse en las estadísticas. Las cifras del 2013, las últimas que están públicamente disponibles, dicen que por muy pocas carreteras de esta zona pasan más de mil vehículos al día. Y solo cuatro tienen algún tramo con más de 3.000. Dos de ellas son de la red estatal: la N-120 (Logroño-Vigo) y la N-540 (Ourense-Lugo). Las otras dos, la LU-546 y el corredor Lalín-Monforte, son competencia de la Xunta.
El récord, en Bóveda
El tramo con más tráfico está en la LU-546, que une Monforte con Lugo y está transformada en corredor de Oural (Sarria) en adelante. En el tramo convencional, a la altura del municipio de Bóveda circularon por esta carretera durante el 2013 una media de 4.313 vehículos. Precisamente esta es la única carretera en la que está en marcha una transformación significativa, porque en pocos meses quedará transformada en vía de alta capacidad, con un trazado nuevo y un radio de curvas más suave. Muy cerca de las cifras de la LU-546 está la N-120 entre Sober y Pantón, donde el tráfico medio diario el año pasado fue de 4.276 vehículos. Es decir, que las mayores concentraciones de coches se producen en las salidas de Monforte hacia Lugo y hacia Ourense.
Tanto la carretera N-540 como el corredor Monforte-Lalín por Chantada se quedan lejos de esas cifras. La N-540 supera por los pelos los 3.000 vehículos diarios solo a su paso por A Barrela (Carballedo), en la zona en la que llevan cuatro años paralizadas las obras de la autovía A-56. En cuanto al corredor, marca la máxima ocupación a la altura de Escairón, y es solo de 2.481 vehículos al día.