El Ayuntamiento anuncia para la edición de este año novedades como la quema de la fachada del palacio condal. El presupuesto es mayor que nunca
08 abr 2019 . Actualizado a las 18:53 h.La Feira Medieval de Monforte sigue sumando ediciones hasta que cumpla veinte años y el Ayuntamiento pueda pedir de nuevo su declaración como fiesta de interés turístico de Galicia. El alcalde José Tomé recordó ayer la decepción que supuso en el 2018 la negativa de la Xunta a darle ese reconocimiento y lo hizo en la presentación de la programación de la fiesta de este año, la más cara desde su inicio. «Nos últimos catro anos -dijo el alcalde- aumentamos o orzamento da Feira Medieval nun 64%».
La edición número diecisiete de la Feira Medieval de Monforte se celebrará los días 20 y 21 de este mes y contará con un presupuesto de 68.000 euros, un 12% por encima del año pasado. El alcalde dio estas cifras ayer en el espacio central de la plaza de abastos, ocupado estos días por un mercado especial previo a la fiesta medieval, con trajes y complementos para quienes se quieran caracterizar de época el fin de semana del certamen, y también con propuestas gastronómicas y hasta de estética personal de resnonancias medievales.
En la presentación, José Tomé, explicó que el progresivo incremento del gasto en la organización trajo consigo desde la primera edición que cada año tuviese más público y más repercusión. Igual que será la más cara, la fiesta de este año será también la que tenga más expositores. Habrá 117 puestos de venta de todo tipo de productos de artesanía y de comida, seis más que el año pasado, que ya había sido de récord.
Los responsables municipales esperan que sea también la más multitudinaria, y para conseguirlo confían entre otras cosas en el tirón de algunos espectáculos nuevos. La organización quiere mimar el fin de fiesta del sábado, así que le proporcionarán un aliciente a la procesión de antorchas que a última hora sube hasta San Vicente desde la plaza de España. Los asistentes tendrán ocasión de disfrutar de una de las novedades que prometen ser más espectaculares, una quema con pirotecnia de la fachada del palacio de los condes de Lemos.
Además, el parador de turismo de San Vicente acompasará esta vez sus ritmos a los de la fiesta y volverá a ofrecer el menú medieval especial que sus clientes pudieron probar ya en alguna otra ocasión hace años.
Decoración nueva desde las Huertas hasta la torre de San Vicente
Un cañonazo disparado por la réplica de una bombarda del siglo XVI anunciará el día 20 que empieza la Feira Medieval, igual que en las dos ediciones anteriores. También se mantienen los espectáculos de cetrería, por segundo año en el Campo de San Antonio, las justas medievales, los paseos en burro y los talleres de artesanía para niños, el concurso para premiar a los mejor vestidos y los espectáculos de ambientación medieval.
El alcalde y los concejales Gloria Prada y José Luis Álvarez presentaron el programa escoltados por dos hombres ataviados como guerreros del Medievo, que forman parte de la asociación de recreación histórica Caballeros de Ulver, el colectivo que se encargará del campamento de la plaza de España, en el que se celebrarán buena parte de los talleres previstos para esos dos días.
El Ayuntamiento se propone engalanar esta vez con adornos de inspiración medieval cinco calles y zonas más que en las últimas ediciones. Serán las calles Huertas y Doutor Casares, la Costa da Pena, el parador y la torre del homenaje.