La comisión cumple siete años

LEMOS

LUIS CONDE

Doce son los ramistas que en febrero dieron el paso para organizar las fiestas de San Antonio

13 jun 2019 . Actualizado a las 12:25 h.

Monforte no se puede concebir sin las fiestas de San Antonio. Para que se celebren cada año, varios grupos de vecinos del barrio trabajan incansablemente para confeccionar un programa variado y de calidad. Esta será la séptima ocasión en la que las organice la actual comisión, de doce componentes. Ricardo Pérez, Penas, José Manuel, Moncho, Liñares, Luis, Marcos, Alberto, Diego, Cuarenta, Lalá y Mon son los voluntarios que el pasado mes de febrero decidieron dar de nuevo un paso adelante para que el barrio y Monforte pudieran disfrutar de cuatro días de festejos.

Los ramistas se dedicaron en cuerpo y alma a recaudar los fondos necesarios para que el programa estuviera a la altura de lo que merecen los vecinos del barrio. Están contentos con su respuesta. «La verdad es que la gente del barrio se está portando muy bien. La media de lo que recaudamos por vecino se supera los cincuenta euros. Después, fuera de esta zona, estamos hablando de una media de entre diez y veinte euros», comenta Ricardo Pérez, uno de los componentes de la comisión.

Es verdad que alguna aportación subió de los 150 euros, pero también las hubo de cinco. Los ramistas piden en el barrio, pero fuera de esta zona también recaudan en Carude, Reboredo y en los negocios de Monforte. «En general, la gente responde porque las de San Antonio son unas fiestas muy queridas. No obstante, hay que señalar que no resulta sencillo organizarlas, porque actualmente los precios de las orquestas y atracciones se disparan», añade Pérez Sánchez.

Este portavoz de la comisión destaca el esfuerzo que supone contar con ocho orquestas de calidad como las que actúan en estos festejos. También hace hincapié en la dificultad que entraña mantener los pasacalles. «Tenemos un problema y es que antes en Monforte había ocho grupos de gaiteiros, y ahora apenas quedan cuatro. No hay relevo generacional y eso pasa factura a las comisiones a la hora de contratar y organizar las alboradas y los pasacalles», asegura.

Un gesto solidario

La principal novedad de las fiestas de este año tiene un nombre: Asociación Ruliños. Este colectivo, en colaboración con la comisión, organizó unas actividades destinadas a los niños con necesidades especiales e hipersensibilidad auditiva. Será esta tarde, entre las siete y las ocho y cuarto. «Estamos contentos de aportar nuestro granito de arena a esta asociación para que los niños puedan disfrutar en el campo. Nuestra solidaridad es total con el trabajo que hacen en este colectivo», dice Pérez.

Otro de los signos de identidad de estos festejos es la tradicional bendición y subasta de roscas. Será hoy a las nueve de la mañana en la Praza de Santa Clara y a partir de las doce y media del mediodía en las inmediaciones de la iglesia de San Antonio. El precio de las roscas oscilará entre los tres y los seis euros y cada cliente se llevará de regalo una planta. Será por gentileza de la emperesa A Campiña. «Desde la comisión organizadora invitamos a todos los vecinos a que acudan y disfruten de estos festejos. En este barrio la gente es muy hospitalaria», concluye Ricardo Pérez.