El paso elevado sobre la vía se abrió sin ampliar calles próximas
03 may 2015 . Actualizado a las 05:00 h.Más de un mes después de la apertura del paso elevado sobre la vía del tren, una infraestructura que se construyó para inutilizar tres pasos a nivel que estaban próximos entre sí y que aún quedaban en el casco urbano, el tráfico de Guitiriz se ha encontrado con un embudo.
La falta de mejoras que ampliasen la Rúa Xermolos, que canaliza el tráfico con el centro de la villa, explica esa situación, aunque Adif (Administrador de Infraestructuras Ferroviarias) acaba de anunciar el próximo inicio de obras en esa calles. Pero, además, en la Avenida da Coruña, parte de la travesía de la N-VI por la que pasa el tráfico que se dirige al paso elevado o que procede de ese lugar, hay también complicaciones al realizar maniobras en los dos sentidos.
al cruzar
De la anchura a la angostura. El automovilista que llega de parroquias como As Negradas, Vilar o Mariz o desde el campo de fútbol, situado al sur de la vía férrea, encuentra buena señalización al llegar al paso elevado y amplitud en el tramo justo anterior. Sin embargo, dejar atrás el paso elevado equivale a notar un evidente contraste. Si un turismo se encuentra en el stop que hay en esa zona y de frente aparece un camión, la falta de espacio se hace evidente. Si el que viene del otro lado es un camión o un autocar, deberá invadir otros espacios: en primer lugar, al cruzar el puente y girar a la izquierda, el de sentido contrario; luego, al avanzar, la cuneta que le queda a su derecha.
después de cruzar
Atención al desembocar en la N-VI. Al girar hacia la derecha, dejando atrás la Rúa Xermolos para continuar por la de Tralouteiro, también se hace prácticamente inevitable invadir el carril contario. La confluencia de esa calle con la Avenida da Coruña, tramo urbano de la N-VI, carece de amplia visibilidad, y cuenta con un espejo que no ayuda al automovilista a calcular bien la distancia con otros vehículos, que circulan tanto en sentido Lugo como en sentido A Coruña.
al dejar la n-vi
Un giro con poco espacio. El automovilista que pasa de la N-VI a Tralouteiro, maniobrando hacia la derecha o hacia la izquierda dependiendo del lugar de donde proceda, debe realizar un giro de 90 grados con poco espacio. Al empezar a bajar, a la derecha hay zona de aparcamiento, que en el tramo inferior se redujo tras la puesta en servicio del paso elevado. Al pasar de Tralouteiro a Xermolos, los vehículos pesados invaden el carril contrario cuando dan la curva y casi rozan la fachada de una casa.
al llegar al paso
Cerca de la cuneta otra vez. El vehículo de gran tamaño que gire a su derecha para seguir hacia el paso elevado tiene muchas probabilidades de tocar la cuneta al abrirse al otro lado en busca de amplitud para esa maniobra.
expectativas
Dos meses para lograr la ampliación. Según anunció esta semana el alcalde guitiricense, Xosé María Teixido, los trabajos de ampliación de la Rúa Xermolos durarán dos meses, y la calle pasará a tener diez metros de ancho -siete en los dos carriles, más 1,50 en una acera y 1,50 en un arcén-.