Al final no hubo negociación. La reunión de la mesa negociadora del Ayuntamiento de Lugo convocada para ayer no llegó a celebrarse, porque el concejal de Protección da Comunidade e Réxime Interior, José Rábade, no creyó oportuna la presencia de público. Varios funcionarios municipales, la mayor parte policías locales, pretendían seguir en directo el debate. Uno de los asuntos era la ampliación de horario de la Policía Local.
Rábade declaró: «A mesa de negociación non é unha asemblea» y dijo que el sindicato CSIF quería «unha negociación con portas abertas». Destacó que la negociación corresponde a los representantes sindicales y que la documentación les fue entregada con antelación suficiente. Rábade, en tono irónico, dijo que parece que hay quien quiere que los asuntos laborales del Concello se negocien «na feira de Adai». Desde la otra parte, hubo coincidencia en señalar que en una reunión anterior Rábade dijo que le gustaría que los funcionarios pudiesen ver qué tipo de representantes sindicales tienen. Indicaron que su pretensión era satisfacer el deseo del edil.
Por CC.OO., Reboredo afirmó que no encuentra en el reglamento nada que impida la asistencia como observadores a las reuniones de la mesa negociadora. Por CSIF, Benito Martínez dijo: «Hoxe viñeron os traballadores, pero non quixo el [Rábade]». Recordó que varios sindicatos han recusado a Rábade como negociador, por su comportamiento con los trabajadores. El presidente de la junta de personal, Jesús Expósito (CC.OO.), dijo que una vez más Rábade «fixo unha demostración de talante» y aseguró que «parte dos asuntos da orde do día están establecidos no regulamento interno (1990) e no convenio colectivo (1992) e hai moitos artículos que actualizar e non só o que lle interesa a el que é o relativo ao horario da Poli