Cárcel para una mujer que actuó como testaferro de unos ciberestafadores que le quitaron 600 euros a una vilalbesa
LUGO CIUDAD
Recibió en su cuenta el dinero que le defraudaron a la víctima suplantando la identidad de su banco
03 jun 2025 . Actualizado a las 17:25 h.La acusada de haberse beneficiado de una ciberestafa actuando como testaferro de unos delincuentes telemáticos aceptó este martes una pena de seis meses de prisión en el juicio que se celebró contra ella en la Audiencia Provincial de Lugo. La procesada, según la Fiscalía de Mondoñedo, actuó como «mula», ofreciéndose a recibir el dinero que estos habían estafado en su cuenta a cambio de recibir una comisión. La mujer perjudicada era residente en Vilalba y tenía su cuenta en la sucursal bancaria de la localidad chairega.
La acusada acudió al juicio a través de una videoconferencia. Tras leer el tribunal los hechos que se le imputaban, ella aceptó el acuerdo de conformidad que había alcanzado su defensa con la Fiscalía. Por ello, su pena ha bajado de los tres años de cárcel y multa de 1.800 euros que se le solicitaban hasta los seis meses de prisión y multa de 600 euros que finalmente se han acordado.
De esta forma, la acusada dio por probados los hechos que le imputaba la Fiscalía. En su escrito, se explica cómo ella «contactó con unos hackers informáticos» para «facilitarles su número de cuenta» a sabiendas de que «cometían delitos por internet». Por ello, les aportó su documentación «a cambio de obtener un beneficio económico cómo sería cobrar una comisión o porcentaje de dinero, para recibir la transferencia realizada por las posibles víctimas» tras ser hackeadas sus cuentas.
Así estafaron a la víctima
En uno de estos fraudes se vio afectada una vecina de la localidad lucense de Vilalba. Fue el 17 de marzo del 2024 cuando recibió un SMS supuestamente enviado por la entidad bancaria en la que ella tenía una de sus cuentas. En ese mensaje, «se le informaba sobre una operación realizada en su cuenta sin estar autorizada por importe de 1443 euros». Alertada por esta circunstancia, se intentó comunicar con su banco, sin saber que realmente les estaba aportando datos sensibles a los estafadores, que estaban suplantando la identidad de esa entidad. De esta forma, consiguieron acceder a una aplicación móvil bancaria que les permitió hacerle una transferencia a la cuenta de la acusada de 600 euros, que recibió «de manera inmediata».
La estafa fue descubierta por los agentes del Equipo @ de la Guardia Civil de Lugo, que actuaron en cuanto la mujer denunció los hechos. La acusada ha sido finalmente condenada por un delito de blanqueo de capitales. A pesar de que su sentencia incluye una pena de seis meses de prisión, la Fiscalía y el tribunal de la Audiencia Provincial acordaron no oponerse a la petición de que se suspenda su ingreso y no entre en la cárcel.