El tráfico podría tener que regresar tres semanas por la vieja autonómica
04 sep 2022 . Actualizado a las 19:31 h.Todo va sobre lo previsto para que previsiblemente en octubre entre en funcionamiento el tramo de autovía entre A Pobra de San Xiao y Sarria, los 11,5 kilómetros de la primera fase del desdoblamiento del actual corredor de Nadela a Sarria.
Pero para ejecutar la parte final de los trabajos desde la Concellería de Infraestruturas están valorando la posibilidad de tener que cerrar varios días, incluso semanas, el corredor de Sarria, con lo que los conductores tendrían que circular un tiempo por la vieja carretera autonómica.
Desde la Xunta señalan que se están ultimando los últimos trabajos de la primera fase de la autovía. Las tareas que quedan para poner en servicio esta autovía son, fundamentalmente, por un lado echar la capa intermedia de la nueva calzada, trabajo que se iniciará la semana que viene, en función de la meteorología, ya que si llueve en abundancia no se podría ejecutar.
Por otra parte, resta echar la capa de rodaje de la nueva calzada y una nueva capa para la ya existente, por la que se circula en la actualidad desde que comenzaron las obras. También faltan por asegurar las cunetas de la nueva carretera.
En estos momentos, los responsables de las obras y de la consellería están valorando distintas opciones para organizar el final de los trabajos teniendo en cuenta la meteorología en esta época del año. Y una de esas opciones, entre otras, dicen desde Infraestruturas que se estudia la de adelantar la disposición de la capa de rodaje de la vieja calzada, sin que la nueva esté disponible, lo que obligaría a un corte de tráfico mientras se ejecuta. La otra opción es, una vez que se termine de acabar la nueva calzada, esta se ponga en funcionamiento y se corte el tráfico de la vieja para echar la nueva capa de rodadura.
En todo caso, exponen desde la Xunta, son propuestas que están encima de la mesa para evaluar: «Unha vez se teñan organizado a disposición destes últimos traballos, comunicarase con antelación suficiente», en referencia a las posibles afecciones al tráfico de una vía por la que circulan a diario una media de unos 7.000 vehículos (según datos del pasado año).
Según otras fuentes, la opción de tener que cortar un tiempo el corredor es la que cobra más visos de producirse porque se aprovecharía para el último asfaltado de ambas carreteras (que serán luego una única autovía), asegurar bien las cuentas y también actuar con nuevas capas de rodadura en las entradas, salidas y otros enlaces. Todos estos trabajos necesitan de seguridad tanto para los operarios como para los propios conductores.
Según las mismas fuentes, el tiempo necesario para el corte podría llegar a las tres semanas (dependería de la meteorología), con lo que durante ese tiempo todo el tráfico actual del corredor volvería pasar por la vieja carretera autonómica, de Sarria, desde Callás (salida-entrada del polígono de Morelle), hasta Láncara (salida-entrada de Maceda).
La Consellería de Infraestruturas ya adjudicó el proyecto de construcción de otro tramo, entre A Pobra y Nadela. Esperan que a mediados del 2023 se pueda someter a información pública a efectos de procesos de expropiación y licitar las obras a finales del próximo año.
