Allariz despide a Fina Rey, la pastelera que popularizó los almendrados e innovó en la repostería local

La Voz OURENSE

OBITUARIOS

Fina Rey, en una imagen del 2013.
Fina Rey, en una imagen del 2013. Miguel Villar

Fundó en 1971 el negocio familiar que ahora regentan sus dos hijos y que conserva la tradición del dulce artesano

18 sep 2025 . Actualizado a las 19:36 h.

María Josefa Rey Beiró (1937- 2025) ha sido una institución de la artesanía del dulce en Allariz. Nacida en Lestrove, Dodro, cerca de Padrón, en 1961 se trasladó con su marido a Allariz. Fundó junto con su esposo, José Mosquera, un obrador de repostería en 1971. Ella era el alma máter del proyecto, por lo que el negocio famular llevó su nombre, Fina Rey. Comenzaron recuperando, con una elaboración totalmente artesanal, los famosos almendrados de Allariz a partir de recetas antiguas de la almendra de pico. «A receita díronma unhas señoras de aquí de Allariz e o meu marido dixo que era mellor que o fixese eu, que se me daba mellor. E así empezamos», recordaba la fundadora sobre los inicios en una entrevista en este periódico. 

El primer obrador estaba ubicado en el casco histórico de Allariz, en lo que hoy es la sede de la Fundación Vicente Risco. Con el tiempo llegarían a tener tiendas en Allariz, Ourense y Madrid.

El matrimonio tenía seis hijos y quería buscar un sustento para la familia, pero a la vez poner en valor la repostería local. Su producto estrella fueron los almendrados y la tarta real, que elaboraban, y siguen haciéndolo, artesanalmente, si bien la distribución se hacía a través de un representante, ya desde los tiempos en que la fundadora y su marido regentaban el negocio. Además de los dulces elaborados con almendra, en Fina Rey comenzaron a introducir el chocolate, con las bolas de almendra bañadas en este cacao y otros productos como bombones o tabletas artesanales. Miguel y Marcos Mosquera Rey tomaron el relevo de su emprendedora madre.

Después de unos años al frente, Fina Rey se quedó viuda en 1990 y se dedicó al cuidado de los hijos. Los pequeños se criaron entre harina y almendras, empaquetando los dulces que elaboraba la madre y dos de ellos se hicieron cargo del relevo de una repostería que lleva el nombre de Allariz por toda la península priorizando la calidad sobre la cantidad

«Foi unha muller loitadora que, coa axuda dos seus fillos, innovou na repostería alaricana, o que continúan facendo eles, seguindo a súa senda», destacaba la concejala de Promoción Económica de Allariz, María López.

María Josefa Rey falleció a los 88 años y su funeral se celebró este jueves por la mañana en Allariz, donde fue despedida por sus familiares y vecinos.