El análisis del Emilio Larraz: «Carlos Mouriz es la piedra angular del proyecto del Racing»

El Racing, alejado de estridencias y ruido, ha visto compensado el trabajo realizado y puede certificar su ascenso directo en Talavera este sábado después de firmar una segunda vuelta sobresaliente si el Alcorcón no logra sumar de tres. Yo, en cierto modo y por todo el recorrido hasta llegar hasta aquí, me siento un poco parte de ello porque comencé el proyecto con ellos, jugadores que estaban con nosotros aún continúan y, por supuesto, continúa Carlos Mouriz que iniciamos el proyecto juntos y está a punto de llegar al objetivo que se marcó hace cinco años y me siento identificado con ello y me alegro de que salga bien.

La clave

Una gestión seria. La clave, lo que me invitó a aceptar el proyecto y darme cuenta de que iba a llegar a buen puerto fue la seriedad que se me transmitió en la gestión. Carlos Mouriz ha sido la piedra angular del proyecto y es bueno para el fútbol que el Racing de Ferrol consiga el objetivo porque va a poner en valor una gestión deportiva ordenada y con máximo respeto a cada profesional en su parcela. Esa ha sido la línea que ha impulsado Mouriz. Nunca se ha movido de ahí y eso ha dado estabilidad.

El vestuario

Jugadores jóvenes y hambre. Carlos Mouriz siempre ha tenido una idea muy clara de cuál era el objetivo y el camino a seguir y es humilde y sencillo porque ha ido aprendiendo en el propio proyecto. Esta última temporada, ha acertado con la búsqueda de futbolistas más jóvenes, con más hambre y que entendían que el Racing de Ferrol les ofrecía la oportunidad de ponerse en un escaparate y dar el salto y crecer con ellos y ha sido una decisión muy correcta.

La afición

El Racing por bandera. El crecimiento, a lo largo de estos cinco años, de la respuesta positiva del aficionado de volver a A Malata y de ilusionarse con el equipo pone en valor la identificación de un pueblo, de un territorio, con su equipo de fútbol como forma de alguna manera de reivindicar sus importancia como ciudad. Es muy importante que ahora veamos A Malata con esas 6.000 personas que ya es el aforo habitual, que no solo están en la grada sino que participan. Es una fuerza fundamental para todo equipo que quiera hacer un proyecto de este tipo, que tenga una masa social que utilice el equipo de fútbol como signo identitario es un valor muy interesante, muy bonito y que está explotando muy fuerte en Ferrol. Esa comunión va a ser invencible y en estas dos semanas el proyecto va a culminar y vamos a ver al Racing en el fútbol profesional de nuevo.

La tabla

Sin presión ante el liderato. Una vez se encuentran en la primera plaza, hay que continuar el camino, no dejarse llevar y seguir empujando. No será necesario hacer nada especial. Están todos los cimientos bien puestos para que todo salga bien. Cristóbal tiene la capacidad y la experiencia como para gestionar esa presión y con lo que se ve desde fuera, el espíritu del equipo, ese asentamiento de la idea de juego y el apoyo de la afición hace que no se necesite nada más para lograr los objetivos. 

La implicación personal

Emilio Larraz, un racinguista más. Como ya dije en mi carta de despedida el día en que el Racing ascienda yo voy a estar ahí, animando. Al ver que podía hacerse realidad tenía pensado estar en A Malata para celebrar el ascenso. Algo que lamentablemente no podrá ser porque con el equipo nuestro hemos tenido un desafortunado final de campeonato y vamos a tener que jugar las eliminatorias de permanencia y no voy a poder estar físicamente allí. A pesar de todo, estaré en espíritu y empujando desde la distancia.

«Ningún futbolista se quiso ir en mis tres años ahí»

Emilio Larraz (Zaragoza, 1968) se puso al frente del banquillo del Racing en el 2018 con la meta de lograr que el equipo saliese del bache de la Tercera División en la que estaba sumido y en su primera campaña como técnico de los ferrolanos logró el objetivo. Así se inició la senda de este Racing, que aspira a regresar al fútbol profesional después de quince años.

Desde su punto de vista, la gestión de la dirección deportiva del club ha sido vital en este recorrido. «La clave es la gestión en todos los órdenes, que ha promovido Carlos Mouriz desde el principio, formando un proyecto en el que los integrantes de la plantilla tenían una gran implicación. Se nota un equipo cohesionado, ilusionado y muy comprometido con el proyecto y el ascenso», determina.

Además, para Larraz la mejor prueba de este trabajo bien hecho es el elevado grado de atractivo que ha tenido el proyecto para los jugadores que han ido pasando por A Malata en estos años.

«Nosotros siempre decíamos que, al menos los tres años que hemos estado allí e imagino que continuará igual, jamás un futbolista se fue él por su propio pie, nadie se quiso ir. Ellos veían que el proyecto era ganador y eran muy bien tratados en todos los órdenes y esto es uno de los puntos importantes», valora el extécnico, que subraya además que el trato brindado a cada uno de las personas que trabajan para el Racing fue también inmejorable durante su etapa en la ciudad.

«Se ha tratado siempre de forma excelente y desde el respeto y el cariño a todos los profesionales y todo eso ha ido generando el caldo de cultivo perfecto», ahonda. Y es que para Emilio Larraz el Racing es ya «un producto acabado y muy fiable», listo para culminar este ciclo.

Emilio Larraz, el técnico que sacó al equipo de la Tercera División e inició un ciclo

Recaló en el Racing en el 2018 con la premisa clara de lograr el ascenso de Tercera a Segunda B. Emilio Larraz aupó a la escuadra de la ciudad naval a la cabeza de la tabla durante su primera campaña y dio cumplimiento a su primera encomienda en tiempo récord. Con un segundo año de transición y el regreso al fútbol profesional en el punto de mira durante su tercera temporada verde, el club cesó al técnico tras dos años y medio de relación en el 2021 tras no obtenerse los resultados esperados y otorgó el testigo a un Cristóbal Parralo que disponía ya de los cimientos erigidos por su predecesor para lograr la meta fijada y que en su tercera campaña en el club acaricia el ascenso directo.

La despedida de Larraz puso de manifiesto el aprecio del profesional por el Racing de Ferrol y la ciudad. Entonces, a través de una misiva abierta a todos los seguidores del combinado verde, el entrenador mostraba sus satisfacción por, señalaba, «haber ayudado a iniciar ese camino de retorno, de ayudar a sentar bases sólidas para el futuro» de un club del que, confesaba entonces, se enamoró. Al igual que de una ciudad que, apreciaba, poseía «cierto aire de nostalgia que añoraba tiempos mejores».

Del presagio a la realidad

Además, la carta de despedida de Larraz ponía el foco en las opciones del Racing en el medio plazo. En este sentido, el técnico no escondía su tristeza por bajarse de un barco que estaba seguro llegaría a buen puerto más tarde o más temprano.

«Os debo confesar que me voy con la pena y el dolor de no haber podido acompañaros hasta llegar al final del camino, estoy seguro de que muy pronto lo conseguiremos», destacaba. Un presagio que, más cinco años después del inicio de un ciclo, puede tornarse al fin en una realidad.

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