La falta de gol, el problema que Menéndez tampoco logra resolver en el Racing de Ferrol

Alejandro Menéndez suma cuatro partidos al frente de la plantilla racinguista, con un balance de una victoria y tres derrotas. Aunque hay que reconocer que las sensaciones que ha transmitido el equipo son algo mejores, las cifras siguen siendo crueles en el equipo ferrolano, con solo tres goles a favor y ocho en contra en estos cuatro encuentros. El equipo ferrolano se puso la soga al cuello frente al Castellón con un tanto de Naldo en propia puerta a los cuatro minutos, siguió por el mismo camino contra el Mirandés con un penalti en contra a los nueve minutos y frente al Córdoba la crueldad llegó a su cota más alta, con un gol en el tiempo de descuento, aunque en esta situación un empate para el Racing es casi como perder.

Cualquier detalle en contra para el Racing, un tanto en propia puerta, un penalti, una pérdida en la frontal del área es casi como una condena a muerte, ya que la capacidad de reacción del equipo en ataque, pensar en una remontada, esta temporada es una misión imposible.

En lo que va de campeonato el Racing no ha marcado en 13 de los 27 partidos que disputó, es decir, no marcó en casi la mitad de los que jugó. Los verdes, con 17 goles en 27 partidos, son el equipo menos realizador de Segunda. Aunque el equipo ferrolano ha sembrado muchas dudas desde que arrancó el campeonato en cuanto al juego, la mayor carencia del equipo es la falta de gol. Cristóbal Parralo cambió el sistema mil veces para tratar de llegar arriba mejor y con más efectivos, aunque no encontró soluciones y parece que Alejandro Menéndez va por el mismo camino.

De los cuatro refuerzos que llegaron en el mercado invernal, tres de ellos, Naïm, Raúl Blanco y Héber Pena son atacantes. De momento, ninguno de ellos se ha estrenado como goleador, aunque al menos Naïm ha dado una asistencia de gol, en el tanto anotado por Perea en un preciso remate de cabeza.

En la etapa de Méndez el equipo racinguista anotó tres goles Dorrío marcó en casa del Levante, tras un pase filtrado excepcional por parte de Josep Señé. El propio Señé marcó de penalti en el partido contra el Castellón y Perea en un preciso remate de cabeza logró el tanto en el choque frente al Mirandés.

El problema puede que no sea solo de los delanteros, sino de la forma de jugar del equipo. Eneko Jauregi es un buen delantero, anotó seis goles en el arranque de la temporada. «Eneko es un jugador de área —dijo Menéndez sobre el vasco— aunque es un delantero de área y está jugando muy lejos del área. Hay que llegar más arriba y con más gente», insistió el entrenador.

Vuelta de Álvaro Giménez

La recuperación de Álvaro Giménez, que anotó trece goles en la pasada campaña y que esta temporada suma cuatro, ofrecerá a Menéndez otra baza que jugar en ataque. El Racing lo necesita, como que Héber Pena recupere lo antes posible la mejor forma física o que Naïm acabe marcando diferencias en ataque.

Alejandro Menéndez quiere que su equipo llegue más y con más gente arriba y pide más calma y cabeza en los últimos metros, ya que se falla en el último pase por precipitación. Lo entrena, aunque luego no se ve reflejado en el campo. No solo los delanteros deben de ponerse las pilas, también el medio campo, estar atento a los rechaces, a las segundas jugadas e intentarlo más con tiros desde el exterior.

Erick Cabaco estaba echando una mano al equipo a la hora se secar el balón jugado desde atrás y así evitar que sea Señé el que tiene que bajar para iniciar la jugada. Son muchas las cosas a mejorar, aunque el Racing ya no tiene tiempo, lo ha ido malgastando en el transcurso de la temporada sin corregir muchos de los errores que ha cometido desde que arrancó la competición.

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