Transición hacia la mejoría, tres ausencias y terapia en A Gándara para el Racing Club Ferrol
OPA RACING
Cabaco, Luis Perea y Rober Correa no participaron en un entrenamiento en el que no faltó el pique sano
30 mar 2025 . Actualizado a las 04:29 h.El Racing Club Ferrol, que cayó ayer por la mínima frente al Deportivo en A Malata, se ejercitó en A Gándara en la mañana de este domingo en la habitual sesión de recuperación. Los titulares trabajaron al margen en compañía del readaptador Óscar Ares y los suplentes se centraron en perfeccionar situaciones de finalización y transición para recuperar el gol que se les resiste desde hace cinco jornadas.
El entrenamiento finalizó con un partidillo a medio campo para trabajar la movilidad y los achiques de espacios. No tomaron parte del entrenamiento ni el mediocentro Luis Perea, del que Menéndez avanzaba este viernes que espera pueda entrar en la convocatoria del lunes frente al Elche, y tampoco el central uruguayo Erick Cabaco, que espera poder recuperar el preparador para la visita al Real Oviedo en el Tartiere.
Después de ser baja sorpresa en el derbi ártabro tampoco participó del entrenamiento el lateral pacense Rober Correa, que tiene una ligera sobrecarga en el isquio. Molestias que no revisten gravedad, con lo que Correa podría volver al ruedo para la visita al Martínez Valero la próxima jornada.
Buen ambiente y pique sano
Así, pese a que las matemáticas cada vez complican más las opciones del Racing, el entrenamiento transcurrió con intensidad e incluso con el pique sano entre los participantes en el partidillo, que le discutían al preparador físico Luis Fandiño el número de goles anotados por ambos equipos. «Ene, ¿cuántos goles llevas?», indicaban al ariete vasco, que se apuntaba dos y reclamaba: «Ganamos 2-4 verdes, ganamos 2-4».
Un grupo de niños aprovecharon los partidos de fútbol base que se estaban disputando en A Gándara para seguir el entrenamiento y, de tanto en tanto, proferir algún que otro «opa Racing» y dejarle claro a Raúl Blanco que es uno de sus favoritos. Y es que, desde el campo anexo al principal, se sucedían una y otra vez los saludos al de Moaña.
También hubo tiempo para ese trabajo psicológico e individual al que alude siempre el entrenador Alejandro Menéndez, que no dudó en mantener una charla de tú a tú con el guardameta vigués Yoel Rodríguez tras el error del inexplicable gol en propia puerta del meta, que acabó anulando para respiro local el colegiado vasco González Esteban.