Estados Unidos tiene dinero hasta junio

Claudia Luna Palencia PERIODISTA MEXICANA RESIDENTE EN ESPAÑA, DIRECTORA DE CONEXIÓN HISPANOAMÉRICA

OPINIÓN

Oliver Contreras / POOL | EFE

09 mar 2023 . Actualizado a las 08:56 h.

Estados Unidos tiene dinero hasta junio. Que su economía pueda caer en default añadiría mayor leña a una hoguera internacional que lleva tiempo ardiendo al calor de la pandemia y de todos los efectos colaterales de la invasión rusa a Ucrania, incluido el shock de los petroprecios y de otros insumos básicos.

La alerta fue lanzada por el departamento del Tesoro, tras advertir que las cuentas nacionales alcanzaron su límite de deuda. Para el Gobierno del presidente Joe Biden implica su primera gran prueba de fuego —este año—, dado que el demócrata deberá negociar con la mayoría republicana en la Cámara de Representantes para que suspenda dicho límite, o bien, en todo caso, lo incremente. El techo de la deuda es por 31,4 billones de dólares.

¿A qué se refiere con techo de deuda? Es un tope en la cantidad total de dinero que el Gobierno federal está autorizado a pedir prestado a través de valores del Tesoro (treasury bonds), como letras y bonos de capitalización, para cumplir con sus obligaciones financieras.

No será una negociación ni rápida ni sencilla para un Biden que atraviesa un año preelectoral; en medio de crecientes presiones por parte de un grupo de republicanos, que no ve con buenos ojos cómo la Casa Blanca concede a diestra y siniestra ayuda y fondos destinados para que el Gobierno de Kiev no sucumba ante la guerra de Putin.

Con datos proporcionados por el Council on Foreign Relations, el año pasado Ucrania recibió —al menos hasta noviembre— 47.900 millones de dólares. La Casa Blanca envió a Kiev tanto ayuda humanitaria (9.900 millones de dólares) como ayuda financiera (15.100 millones de dólares) y asistencia militar con armamento (22.900 millones de dólares), y una pequeña parte de créditos para armamento.

Ante Zelenski, el presidente Biden ha refrendado públicamente su compromiso de continuar apoyando a Ucrania, a pesar de haber perdido fuerza política en el Congreso: resultado de las elecciones del pasado 8 de noviembre, la nueva composición de la cámara baja es de 222 legisladores republicanos frente a 212 congresistas demócratas, y permanece un asiento vacante.

Y mientras la guerra alargue sus días, habrá mayor demanda de armas y de asistencia para las tropas ucranianas para resistir el asedio ruso; el escenario puede volvérsele en contra y dantesco a un Biden que, además, pretende luchar otra vez en el 2024 por la presidencia.

Si en la Cámara de Representantes no logran desatascarse los apoyos necesarios para ampliar el límite de la deuda, la economía global podría sufrir esta vez una volatilidad derivada ya no de la pandemia o de la guerra, sino de la falta de cumplimiento de pago de la unión americana de sus compromisos financieros.

A Biden le tocará ser diligente con la mano derecha, porque tendrá que convencer a sus opositores. En este sentido, el canal CNBC difunde que la Casa Blanca dará prioridad a las negociaciones de un nuevo proyecto para aumentar el techo del endeudamiento. Los propios republicanos podrían agotar todos los plazos para fastidiar al actual inquilino de la Casa Blanca; incluso, para orillarlo a aceptar una serie de recortes en el gasto. Esta inestabilidad terminará afectándonos.