Son muchas las personas que sufren estreñimiento de manera puntual o crónica y comprenden lo mal que se pasa y los problemas asociados a esta situación. Es importante acudir al médico y seguir sus indicaciones, pues las causas de este problema son múltiples y deben ser valoradas antes de su tratamiento. Algunas recomendaciones pueden ayudarle a mejorar si modifica su dieta y estilo de vida.
Se recomienda seguir una dieta variada rica en fibra que incluya varias raciones de fruta diarias (kiwi y ciruelas, por ejemplo), respetando los horarios y masticando los alimentos para favorecer su digestión y la formación del bolo alimenticio; beber agua en cantidad suficiente, para mantener una buena hidratación en el organismo y favorecer la formación de las heces; e incluir en su menú diario frutos secos (nueces, avellanas y pistachos, entre otros), que resultan nutricionalmente completos y favorecen el tránsito intestinal.
Educar al aparato digestivo. Es importante que se acostumbre a defecar en horarios concretos y dedicarle un tiempo suficiente, sin estar mirando el reloj porque llega tarde al trabajo. Moverse, caminar, hacer deporte o ejercicio a diario para favorecer la motilidad intestinal. Acudir a un gimnasio sería perfecto, pero si su tiempo es limitado, camine todo lo que pueda y haga sentadillas en casa. Controlar el estrés y descansar adecuadamente, porque afectan negativamente a la evacuación normal de las heces y a la motilidad intestinal. Evitar el consumo incontrolado de laxantes. Su efecto no es inocuo y pueden resultar perjudiciales. Los laxantes son compuestos variados que aumentan el ritmo intestinal y el número de defecaciones. Se pueden consumir por vía oral o rectal (en forma de supositorios de glicerina), pero jamás sin prescripción de su médico.