A Rubiales siempre le quedará Piqué

Fernando Hidalgo Urizar
Fernando HIdalgo EL DERBI

OPINIÓN

J.J.Guillén | EFE

24 ago 2023 . Actualizado a las 21:13 h.

La irrupción del miércoles de Jennifer Hermoso pidiendo que Luis Rubiales no quede impune por su beso robado tras la final del Mundial casi le dio la puntilla. Ya no había marcha atrás. El país era un clamor, pero faltaba ella por significarse sin medias tintas. Lo hizo y condenó al controvertido presidente de la Federación Española de Fútbol.

Por si fuera poco, este jueves la FIFA, muy sensibilizada con el fútbol femenino, entró en acción y decidió abrir un expediente que ineludiblemente acabará en una sanción.

La cosa no tenía marcha atrás. Solo había una forma de cerrar este caso: la salida de Rubiales de la poltrona. Y no por un pequeño período de tiempo. Alguien que se comporta como él no puede representar a una entidad como es la RFEF.

El CSD, su presidente, y el propio ministro Iceta, tenían la obligación moral de vigilar este caso para que Rubiales no saliese de esta con un castigo de mentira. No podía ser que dentro de unos meses, alguien que entiende que su representación de España pasa por cogerse con vehemencia sus testículos, volviera a ejercer y a ganarse el sueldo cuasi millonario que tiene en la actualidad.

El aldabonazo de la FIFA ha sido definitivo y acabó con Rubiales. Y el jueves, presionado por todos los frentes, presentó la dimisión. Cayó tal y como muchos habían imaginado: víctima de sus propios excesos. Porque su trayectoria al frente de la Federación Española de Fútbol ha dado muchas tardes de gloria. Ha viajado de polémica en polémica y ha convertido a los abogados en las auténticas estrellas de una entidad que debería de trascender solo por el fútbol. Rubiales dejó en un juego de niños la guerra de Javier Tebas con Villar y protagonizó todo tipo de episodios polémicos. Desde el despido de Lopetegui como seleccionador, a sus grabaciones de conversaciones con ministros e incluso con el propio Pedro Sánchez, pasando por sus retribuciones y los líos de la Supercopa.

Y, en cualquier caso, a pundonor Rubiales siempre le quedará la posibilidad de irse con su amigo Gery Piqué a Arabia Saudí y montar algún negocio, que para eso ya tienen experiencia.